Enlace Judío México e Israel – Los principales candidatos presidenciales demócratas de EE.UU., condenaron el anuncio del Secretario de Estado de EE.UU. Mike Pompeo de que la administración de Trump ya no considera los asentamientos israelíes en Cisjordania como una violación al derecho internacional.

El ex vicepresidente y actual candidato demócrata, Joe Biden calificó la medida como “un obstáculo para la paz”.

“Esta decisión perjudica la causa de la diplomacia, nos aleja de la esperanza de una solución de dos Estados y no hará más que exacerbar las tensiones en la región. No se trata de paz o seguridad. No se trata de ser pro-Israel. Se trata de socavar el futuro de Israel al servicio de la política personal de Trump”, dijo la campaña de Biden a Jewish Insider.

El senador Sanders de Vermont condenó la medida y enfatizó que “los asentamientos israelíes en territorio ocupado son ilegales. Esto se desprende claramente del derecho internacional y de múltiples resoluciones de las Naciones Unidas. Una vez más, el Sr. Trump está aislando a Estados Unidos y socavando la diplomacia al consentir a su base extremista”, escribió.

Elizabeth Warren, senadora de Massachusetts que compite con Sanders por los votantes más progresistas del partido, también condenó el anuncio.

“Otro descarado intento ideológico de la administración de Trump para distraer de sus fracasos en la región. Estos asentamientos no sólo violan el derecho internacional, sino que dificultan la paz. Como presidente, revertiré esta política y buscaré una solución de dos Estados”, manifestó.

Pete Buttigieg, alcalde centrista de South Bend, Indiana, y candidato demócrata a la presidencia aseveró que la decisión socava los esfuerzos de paz.

“La declaración de la administración Trump sobre los asentamientos de Cisjordania no sólo es un paso atrás significativo en nuestros esfuerzos por lograr una solución de dos Estados para el conflicto israelí-palestino, sino que se suma a un patrón de decisiones destructivas que perjudica nuestros intereses nacionales”, dijo Buttigieg.

Amy Klobuchar, senadora de Minnesota que no se encuentra entre los principales candidatos, señaló que la decisión “va en contra de la política estadounidense de larga data. Una vez más, Donald Trump está jugando a la política y nos aleja del camino hacia una solución de dos Estados”.

Las legisladores demócratas liberales Rashida Tlaib e Ilhan Omar, ambas críticas frecuentes de Israel, también castigaron a la Casa Blanca tras el anuncio.

“Los asentamientos israelíes en Cisjordania violan el derecho internacional. No importa lo que diga este corrupto e inmoral régimen de Trump (sí, es un dictador sin ley), eso no cambia ese hecho”, escribió Tlaib en Twitter.

“Los asentamientos israelíes violan el derecho internacional, décadas de política exterior estadounidense y los derechos humanos de los palestinos. Todos los que creen en la posibilidad de la paz deben hablar en este momento”, agregó Omar.

Algunos legisladores republicanos se pronunciaron a favor de la medida.

“Este anuncio es un repudio a los esfuerzos mal informados del presidente Obama y del secretario de Estado John Kerry de atacar la presencia israelí en Cisjordania. Aunque apoyo firmemente una solución de dos Estados, creo que el anuncio de la administración de Trump hoy, hará avanzar la causa de la paz con el tiempo”, expresó la senadora Lindsey Graham de Carolina del Sur.

El senador Ted Cruz de Texas subrayó que la decisión ayuda a revertir el “vergonzoso legado” de la política de la administración Obama hacia Israel.

“Durante demasiado tiempo, Estados Unidos ha tardado en reconocer la realidad básica de que nuestros aliados israelíes tienen soberanía sobre sus territorios, y hoy la administración ha tomado medidas para corregir ese error”, dijo Cruz.

El lobby pro-Israel AIPAC dijo en un comunicado que “no toma posición sobre los asentamientos. Creemos que los acuerdos deben ser un tema de negociación directa entre las partes, no algo que determinen los organismos internacionales. Los palestinos deben poner fin a su boicot a funcionarios de EE.UU. e Israel y reanudar el diálogo directo”.

La embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Kelly Craft, escribió en Twitter después del anuncio: “Mientras que #Israel está rodeado de vecinos que buscan su destrucción, la comunidad internacional tiene la audacia de hacer de esta nación objeto de sus más duras críticas. No voy a tolerar esto, ni hoy ni en cualquier otro momento”.

“Para ser claros, Estados Unidos sigue plenamente comprometido con la causa de la paz. El anuncio de hoy no altera este hecho. Y así como estamos comprometidos con la paz, estamos comprometidos con Israel”, añadió Craft.

La ONG Human Rights Watch dijo en respuesta al anuncio que “los asentamientos israelíes siguen siendo crímenes de guerra”.

“Esto no cambia nada. El presidente Trump no puede borrar décadas de derecho internacional que establecen de que los asentamientos son un crimen de guerra. Estados Unidos se ha beneficiado durante mucho tiempo de la adhesión a las leyes de la guerra y no debería abandonarla, especialmente a expensas de los civiles palestinos”, dijo Andrea Prasow, directora en funciones de la organización sin fines de lucro en Washington.

La directora ejecutiva del Consejo Judío Democrático de Estados Unidos, Halie Soifer, señaló que la “reversión de décadas de la política de Estados Unidos es una luz verde para la anexión israelí de Cisjordania, que impedirá permanentemente las perspectivas de una solución de dos Estados”. Dijo que Trump “no entiende lo que significa ser pro-Israel y los votantes judíos rechazan su imprudencia”.

La organización liberal de política de Oriente Medio J Street describió la medida como un “regalo destructivo” a la derecha israelí, y acusó a Washington de “destrozar la limitada credibilidad que le queda a Estados Unidos en la región y en todo el mundo”.

“Este anuncio es sólo el último de una larga serie de acciones de la administración de Trump destinadas a ayudar al movimiento de asentamientos israelíes, evitar una solución de dos Estados y proporcionar regalos políticos al primer ministro Netanyahu”, dijo el presidente de J Street, Jeremy Ben-Ami en un comunicado.

“El momento escogido para este anuncio sólo puede interpretarse como el último intento desesperado de impulsar las perspectivas personales del primer ministro”, añadió Ben-Ami, refiriéndose a la lucha de Netanyahu por permanecer en el cargo tras elecciones no concluyentes.

Por su parte, el embajador de Israel en Estados Unidos, Ron Dermer, elogió el cambio en la política estadounidense.

“Al rechazar la mentira fundamental de que el pueblo judío es colonialista en nuestra propia patria, el presidente Trump, el secretario Pompeo y el embajador de Estados Unidos en Israel Friedman han hecho una contribución esencial al avance de la paz”, aseveró Dermer.

Trump aún no se ha pronunciado sobre el cambio de política.

Con información de The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico