#EnlaceJudío México e Israel.- El primer ministro Benjamin Netanyahu prometió en su discurso de victoria tras ganar las primarias del Likud el jueves que si es reelegido primer ministro, traerá el reconocimiento estadounidense de la soberanía israelí sobre cada comunidad judía en Judea y Samaria.
GIL HOFFMAN
Hablando después de derrotar al legislador Guideon Sa’ar del Likud, Netanyahu no mencionó a Sa’ar. En cambio, declaró la victoria sobre el mal tiempo, la prensa y “quienes distribuyen encuestas y noticias falsas“. Dijo que recibió un nuevo mandato masivo del Likud.
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“La mayor parte de la nación apoya a la derecha y la mayoría de la nación me apoya a mí para ser primer ministro“, dijo Netanyahu a la multitud en el centro de convenciones de Airport City. “La gran victoria en las primarias fue un gran voto de confianza en mí y en nuestro camino. Demostramos que podemos ganar en grande“
Netanyahu prometió en el discurso que si gana las elecciones del 2 de marzo, se asegurará de obtener más logros diplomáticos.
“En los próximos años, entregaremos más logros que solo podrían haberse soñado“, dijo. “Estableceremos nuestras fronteras finales, lograremos el reconocimiento estadounidense para el control israelí sobre el Valle del Jordán, el Mar Muerto y nuestra soberanía sobre cada asentamiento en Judea y Samaria, obtendremos un pacto de defensa con Estados Unidos que garantizará la libertad de acción israelí, derrotaremos a Irán y lograremos un pacto de paz con los países árabes“.
Netanyahu recibió 41,792, que fue el 72.5% de los votos y Sa’ar 15,885 votos, que fue el 27.5%. De las 106 mesas electorales en todo el país, Netanyahu ganó 99 y Sa’ar solo siete.
“¡Una gran victoria!” Netanyahu escribió en Twitter después de que comenzaron a llegar los resultados iniciales de las elecciones. “Gracias a todos los miembros del Likud por la confianza, el apoyo y el amor. Llevaré al Likud a una gran victoria en las próximas elecciones y continuaremos liderando el Estado de Israel a logros increíbles“.
Sa’ar llamó a Netanyahu aceptando su derrota y le prometió que él y los cinco legisladores del Likud que lo apoyaban estarían detrás del primer ministro antes de la carrera de la Knéset del 2 de marzo. Pero tras dos semanas en que los asociados de Netanyahu atacaran a Sa’ar por desafiar a Netanyahu, Sa’ar dijo que no se disculparía por su campaña.
“Este concurso fue inmensamente importante para el Likud y su carácter democrático“, dijo. “Estoy contento con mi decisión de correr, fue la decisión correcta. Quienes no están dispuestos a arriesgarse por lo que creen, nunca triunfarán“.
El presidente de la facción del Likud, Miki Zohar, dijo que los resultados demostraban que la nación respalda a Netanyahu a pesar de los medios. Llamó a Netanyahu a buscar inmunidad de enjuiciamiento en sus casos penales para poder seguir siendo primer ministro.
El líder azul y blanco, Benny Gantz, respondió a la carrera del Likud diciendo que “el acusado Netanyahu, que está llevando al Estado de Israel por un camino de corrupción, continuará liderando el Likud. El movimiento de Jabotinsky y Beguin, que hablaba de la supremacía de la ley, eligió a un líder que enfrenta tres acusaciones, que busca desentrañar el estado de derecho y garantizar la inmunidad personal, en lugar de abordar las preocupaciones reales del pueblo israelí”.
Avodá-Gesher dijo que los resultados demostraron que el Likud está desconectado de la nación. El jefe del equipo de respuesta de Kajol Lavan, el legislador Asaf Zamir, escribió en Twitter: “El Likud ahora es oficialmente el partido de Bibi, y quien no sea un Bibista completo, y todavía hay Likudniks así, no pertenece allí“.
El clima tormentoso en todo el país, la percepción de que Netanyahu ganaría fácilmente y una decisión judicial del Likud que requería que miles de miembros del Likud viajaran lejos para votar resultó en una participación en las primarias del Likud del jueves de alrededor del 49 por ciento.
Netanyahu y Sa’ar viajaron a los colegios electorales de todo el país en un esfuerzo por persuadir a la gente a votar. Mientras que Sa’ar y su equipo de campaña expresaron lo que llamaron optimismo cauteloso, Netanyahu emitió declaraciones expresando su preocupación de que la baja participación perjudicaría sus posibilidades de salir victorioso en la carrera.
“La gente me dice que quiere que gane, pero no vota porque están seguros de que ganaré de todos modos“, dijo Netanyahu en un comunicado que pronunció en las redes sociales el jueves por la noche.
En declaraciones a los activistas del Likud en la mesa de votación del Centro Internacional de Convenciones de Jerusalén, poco después de que él y su esposa Sara votaran en casa, Netanyahu dijo: “No dejen que la victoria y la lluvia nos derroten. Nuestro viento es más fuerte“.
Pero KAN News informó que la preocupación de Netanyahu no era sincera y que los datos de su propia campaña encontraron que la participación de sus partidarios era diez por ciento más alta que la membresía del Likud en general.
Sa’ar votó en el Consejo por un edificio de Israel Hermoso en Tel Aviv junto a su esposa, la presentadora veterana Gueúla Even-Sa’ar el jueves por la mañana, y expresó su esperanza en una victoria inesperada.
“Este es un día fatídico para el Likud y el Estado“, dijo. “Tenemos el poder de lograr un cambio y una nueva esperanza para los ciudadanos de Israel y garantizar el reinado continuo del campo nacionalista y una victoria para nuestro camino. Les pedí su confianza y sus votos para lograr la visión que el pueblo de Israel espera. Los votantes del Likud deben votar y garantizar la victoria del partido en las elecciones del 2 de marzo“.
Poco después de la hora en que debía comenzar la votación el jueves por la mañana, Sa’ar se quejó de que esta había comenzado antes de tiempo de manera ilegal en los principales estados electorales y que a los observadores de su sede les habían impedido ingresar a los colegios electorales, incluido un incidente particular de manipulación de votos en Hadera. La campaña de Sa’ar envió una carta al comité electoral del partido quejándose de los problemas.
Los 116,048 miembros de Likud fueron elegibles para votar en su mesa de votación asignada entre 106 en todo el país de 9am a 11pm.
Tamar Be’eri y Aaron Reich contribuyeron a este informe.
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