Enlace Judío México e Israel – El líder del partido Yisrael Beitenu, Avigdor Lieberman, dejó en claro que no respaldará que la Knéset otorgue inmunidad parlamentaria a Benjamín Netanyahu, de cara a la acusación penal que enfrenta.

“Ahora está claro más allá de toda duda. Todo el interés y lo que le interesa a Netanyahu es la inmunidad. Con esto se levanta en la mañana, con esto vive y respira a lo largo del día, y con esto se va a dormir”, escribió Lieberman en una publicación en redes sociales.

“El Estado de Israel se ha convertido en un rehén del problema personal y privado de Netanyahu… lo único que está frente a sus ojos es una coalición para la inmunidad”, continuó Lieberman.

El legislador afirmó que desde su partido “no seremos parte de una coalición para la inmunidad. Todos, de manera unánime, votaremos contra la inmunidad a Netanyahu”, concluyó.

Luego de que un legislador israelí solicita a la Knéset que se le otorgue una inmunidad parlamentaria, el asunto es abordado por el Comité de Asuntos Internos de la Knéset, que debe decidir si es factible o no proceder con ello.

En caso de ser aceptado por el Comité de Asuntos Internos de la Knéset, este lo traslada al pleno para que sea aprobada o no por una mayoría de 61 votos la decisión de otorgar una inmunidad parlamentaria al legislador que lo solicitó.

Ante la inestabilidad política que dejaron las elecciones del 9 de abril y del 17 de septiembre del año pasado, no existe la conformación por el momento del Comité de Asuntos Internos de la Knéset, por lo que la decisión sobre la solicitud de inmunidad parlamentaria no puede ser decidida sino hasta que el órgano se establezca, cosa que podría realizarse hasta después de las elecciones del 2 de marzo.

Pese a que este es un punto de vista considerado incluso por el consejero legal de la Knéset, existe la posibilidad de que el Comité de Disposiciones de la Knéset, otro órgano interno liderado actualmente por Avi Nissenkorn de Kajol Lavan, pueda decidir el establecimiento de un Comité de Asuntos Internos de la Knéset de manera temporal con el solo fin de substanciar el caso de Netanyahu antes de los comicios.

En los resultados de las pasadas elecciones, Lieberman ha resultado el actor legislativo clave que podría dar, tanto al bloque de partidos de derecha como de centro-izquierda, la posibilidad de superar el umbral de los 61 escaños de la Knéset para formar gobierno.

Debido a sus desacuerdos con Netanyahu en materias políticas, Lieberman ha rechazado unirse a la coalición de partidos de derecha liderada por el primer ministro, y ha insistido en la conformación de un gobierno de unidad solo entre el partido Likud, el partido Kajol Lavan y su partido Yisrael Beitenu.

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