(JTA) — Un diseñador de disfraces para niños en Ucrania sacó de su catálogo en línea los disfraces de judíos haredíes que se comercializaron, haciendo uso de lo que muchos creen que se considera es un insulto racial.
El taller de Assol en Lviv, que cuenta con unos pocos cientos de judíos en una población de aproximadamente 720,000 personas puso fuera de servicio el lunes los disfraces, que incluyen mechones laterales falsos, o Peyes, así como joyas. Los disfraces, para niños y niñas, se vendieron por 15 dólares y se anunciaron con la palabra Zhyd. En ruso, la palabra es un insulto y es visto como tal por los líderes de la judería ucraniana, la mayoría de los cuales hablan ruso en casa.
Sin embargo, algunos ucranianos sostienen que en el idioma ucraniano, la palabra es neutral y no es más ofensiva que la palabra para los judíos en ruso, Evrei.
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“No teníamos la intención de ofender a los miembros de la minoría judía”, escribió el taller en su página de Facebook, y agregó: “Nos disculpamos sinceramente”.
Shimon Briman, un periodista israelí, publicó en Facebook sobre el disfraz el domingo, y agregó que lo encontró insípido teniendo en cuenta la historia sangrienta de los judíos en Ucrania y en Lviv, específicamente. La ciudad era un 30% judía antes del Holocausto.
El disfraz de los niños presentaba un sombrero negro con mechones laterales largos y un cuello de piel sintética con estampado de leopardo.
Lviv tiene un restaurante popular aunque controvertido donde los camareros se visten como judíos jaredíes y se espera que los clientes regateen sobre el cheque al final de la comida.
