La tranquilidad generada por un crecimiento moderado, sin gran inflación y con desempleo muy bajo, no duró mucho, ya que la enfermedad en China pudiera crecer mucho antes de ser contenida, y la memoria del SARS de hace 16 años tiene a mucha gente asustada.
El número de contagios y muertos (17 mil 900 y 370) a la fecha de escribir este artículo no es dramático, pero sí indica un contagio rápido, sin control, y sin vacunas para combatirlos. Las medidas tomadas como cuarentenas de ciudades enteras, restricciones en vuelos, etc., no parecen estar dando resultados y tendremos que observar con mucho cuidado el progreso de la epidemia para ver si es contendía antes de impactar el crecimiento global.
El precio del petróleo ha bajado 13% y el del cobre 8% desde que empezó el virus por temor a la baja de consumo en China, y otras materias primas ya empiezan a verse afectadas.
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El juicio contra Trump llegó al Senado después de que el Congreso demócrata sí aprobó enviarlo a la siguiente etapa, pero la mayoría republicana votó (51 de 53) en no admitir nuevos testigos ni prolongar el proceso. Dado que se necesitan 67 de 100 votos para sacarlo de la presidencia, es 100% seguro que esto no sucederá. Creo que este proceso debilitó a los demócratas, pues desde un principio era una causa fallida, y Trump salió del lío muy fácil.
El proceso electoral ya está entrando a un período de más ebullición con los primeros resultados de Iowa esta semana y a solo un mes del súper martes, donde se definen un tercio de los delegados para la convención de los demócratas. Aparentemente Bernie Sanders, un socialista de ideas extremas, va adelante, lo cual no seria bien recibido por los inversionistas. Pudiera ser que se llegue a una “Convención Negociada” sí ningún candidato teniendo mayoría, y se requiera de varios ciclos de votos antes de elegir al candidato que le disputará a Trump la presidencia en Noviembre.
Los datos económicos siguen positivos pero moderados, con una creación promedio de 180,000 empleos al mes, 3.5% de desempleo, inflación del 2.1% y crecimiento de 2.3% del PIB en 2019. El pronóstico para 2020, antes del coronavirus y del problema de Boeing con el 737 Max, era de repetir el 2.3%, pero ya hay quien habla de solo 2% para todo el año.
La situación en México sigue muy complicada, con una dualidad de una disciplina fiscal admirable (no gastar más de lo del presupuesto) y una moneda muy sólida sostenida por las tasas reales (intereses menos inflación) más altas del mundo.
Por otro lado, están la falta de inversión en infraestructura, la nueva política de no pagar compromisos vencidos, y restringir los fondos prometidos a los estados.
La iniciativa privada sigue sin invertir en espera de mayor claridad en la política pública, pero me preocupa sobremanera que la captación de impuestos se venga abajo. y el gobierno no cuente con los recursos necesarios para su operación normal, así como para otorgar los 23 millones de nuevos subsidios que se han creado en la actual administración. Inclusive el precio del petróleo no está ayudando, ya que la mezcla mexicana ya está por debajo de los $49.00/barril del presupuesto y no toda la producción está cubierta con los futuros adquiridos.
Tal como había yo pronosticado en esta columna, el PIB de 2019 fue negativo (-0.1%) y el pronóstico para 2020 hoy es del 0.7% pero tengo serias dudas de que se alcance esta cifra.
La economía en Israel sigue sólida en base a las innovaciones tecnológicas, pero ya llevan casi un año sin gobierno, lo que ha detenido muchos planes de inversión. El país está a punto de tener una tercera elección, y al no haber conseguido Netanyahu la inmunidad que pidió, sigue estando en duda que va a pasar y quien será el próximo primer ministro.
El shekel se ha revaluado 5.5% en el último año y cada día está más caro visitar el país, ya que en dólares casi todo está 10% más caro que a principios de 2019.
Creo que es necesario que ya se normalice la situación, ya que los jóvenes no están contentos, sobre todo por lo caro de la vivienda, y podría haber una manifestación seria de ese disgusto si no se ve una solución a corto o mediano plazo.
Los mercados accionarios tuvieron un buen inicio de mes, pero sufrieron la caída más fuerte de los últimos 6 meses en la última semana al seguir impactando el coronavirus. La bolsa china estuvo cerrada una semana por el año nuevo lunar y reanudó actividades con una caída del 9% en un solo día.
Los bonos tuvieron un mes excepcional, ya que cuando hay temor y desconfianza, los inversionistas buscan el refugio de la renta fija e inclusive los bonos de los países emergentes dejaron 1.5% en el mes de Enero.
El oro llegó a $1,620.00, el precio más alto de los últimos 6 años, pero regresó a $1,575.00, aún elevado, pero ya no en su punto máximo. Esto es otro reflejo de la incertidumbre creada por causas no financieras.
Les deseo como siempre un año de paz y tranquilidad y les envío un caluroso saludo.
