Enlace Judío México e Israel.- El embajador adjunto de Israel en la ONU ha elevado una reprensión al Ministerio de Exteriores belga por invitar a hablar en el Consejo de Seguridad a un activista que apoya el terrorismo palestino

RAPHAEL AHREN

El embajador adjunto ha convocado al Ministerio de Relaciones Exteriores para una reprensión “muy dura” tras la invitación de Bruselas a que el activista pro-palestino “radical” Brad Parker se dirigiera al Consejo de Seguridad

Israel está enojado con Bélgica por lo que Jerusalén dice que es una campaña sistemática para demonizar al estado judío en las Naciones Unidas, incluso invitando a un activista pro-palestino “radical” la próxima semana en el Consejo de Seguridad.

En febrero, Bélgica ocupa la presidencia rotativa del consejo y está utilizando este privilegio para invitar a oradores que, según los furiosos funcionarios de Jerusalén, tienen un sesgo extremo anti-Israel. Estaban especialmente indignados porque Bruselas invitó a Brad Parker, un alto funcionario de una organización sin fines de lucro llamada Defensa Internacional de los Niños – Palestina (DCI-P), a hablar en la sesión del consejo.

“Bélgica se ha posicionado como uno de los estados miembros del Consejo de Seguridad más hostiles hacia Israel”, dijo el jueves el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lior Haiat. “Invitar a un activista radical unilateral como el Sr. Parker a informar al Consejo de Seguridad es otro récord negativo”.

El embajador de Israel en Bélgica, Emmanuel Nahshon, visitó Twitter el jueves para expresar su pesar con Bruselas por invitar a “partidarios del terrorismo” al Consejo de Seguridad. “Es extremadamente decepcionante y expresaremos nuestra indignación en los términos más enérgicos posibles”.

El jueves, el Ministerio de Relaciones Exteriores convocó al vice embajador belga Pascal Buffin para una reprimenda. Fue reprendido por Alon Bar, jefe de la División de Organizaciones Internacionales y de la ONU del ministerio, quien exigió que Bélgica reconsiderara la invitación a Parker.

“Fue una conversación muy dura”, dijo un funcionario diplomático israelí, que habló bajo condición de anonimato.

Invitar a Parker, abogado estadounidense y activista de los derechos de los palestinos, fue solo uno de los varios pasos que Bruselas ha tomado desde que se unió al Consejo de Seguridad en enero de 2019, dijo el funcionario.

“Bélgica se ha posicionado como el estado más antiisraelí en el consejo. Sus iniciativas han superado las de los otros estados pro-palestinos”, agregó el funcionario, refiriéndose a países como Sudáfrica, Indonesia y Túnez.

“Lo vemos como una política belga sistemática para golpear a Israel en el Consejo de Seguridad tratando de hacer eco de voces que acusan a Israel de cometer crímenes de guerra. Y esto es totalmente inaceptable”, dijo el funcionario.

Contactado por The Times of Israel el jueves, Parker insistió en que no apoya el terrorismo.

“Me pidieron que informara al consejo específicamente sobre violaciones graves contra los niños como parte de la agenda de la ONU sobre conflictos armados y niños que incluye la situación en Israel y el territorio palestino ocupado”, escribió en un correo electrónico.

Brad Parker (Twitter)

“Es un mecanismo basado en evidencia liderado por UNICEF sobre el terreno en el OPT y mis comentarios, una vez escuchados, no deberían ser controvertidos. Estas acusaciones son un intento de silenciar el trabajo legítimo de derechos humanos exponiendo la realidad de los niños afectados por la ocupación militar israelí”.

Funcionarios en Jerusalén y defensores pro israelíes acusan a la organización sin fines de lucro de tener un sesgo extremo contra Israel, acusando regularmente al estado judío de cometer crímenes de guerra.

Parker dijo en enero de 2019: “Las fuerzas armadas israelíes han estado implicadas regularmente en violaciones generalizadas y sistemáticas de los derechos humanos contra niños palestinos, pero la impunidad sistémica es la norma”.

En 2015, un año después de la Operación Margen Protector de Israel contra los terroristas de Gaza, Parker acusó al estado judío de violar la ley internacional y llevar a cabo “ataques indiscriminados”.

NGO-Monitor, un grupo de vigilancia israelí que critica a las organizaciones sin fines de lucro pro-palestinas, en febrero de 2019 afirmó que “numerosos miembros de la junta, funcionarios y empleados de DCI-P” son miembros del Frente Popular para la Liberación de Palestina, un grupo terrorista reconocido internacionalmente. Dio detalles sobre varios de esos funcionarios y sus supuestos vínculos con el PFLP.

Uno de los principales donantes de DCI-P es la organización benéfica católica de Bélgica Broederlijk Delen, que está fuertemente financiada por el gobierno en Bruselas, según NGO-Monitor.

“No puedo imaginar cómo el gobierno belga justificó invitar a una ONG de propaganda vinculada al terror para dirigirse al Consejo de Seguridad”, dijo el director de ONG-Monitor, Gerald Steinberg, a The Times of Israel. “Quizás la firme respuesta israelí finalmente lleve a algunos funcionarios europeos a examinar sus estrechos vínculos con la red de ONG palestinas”.

Parker, en su respuesta a The Times of Israel, amenazó con demandar a cualquiera que acusara a su organización de tener vínculos terroristas.

“DCI-P ha contratado e instruido a abogados en el Reino Unido y en otros lugares para que emprendan acciones legales con respecto a acusaciones similares de vínculos con grupos designados como organizaciones terroristas u otras afirmaciones de que DCI-P apoya el terrorismo”, escribió.

“En lugar de exigir que las fuerzas israelíes dejen de matar intencional e ilegalmente a los manifestantes palestinos en Gaza con munición real o que las autoridades israelíes responsabilicen a los perpetradores, los funcionarios israelíes y las crecientes fuerzas sociales nacionalistas conservadoras en Israel crean y difunden información errónea con el objetivo de silenciar y eliminar el trabajo legítimo de derechos humanos que expone las violaciones de los derechos humanos inherentes a la ocupación militar palestina de Israel”, agregó.

La embajada belga en Israel y su misión ante la ONU en Nueva York no respondieron a las consultas de The Times of Israel a tiempo para su publicación.

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