Enlace Judío México e Israel – Una prueba para coronavirus SARS-CoV-2 fue realizada al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, así como a su equipo cercano.
La Oficina del Primer Ministro comunicó este domingo que, de acuerdo con las directivas del vicedirector general de Seguridad y Emergencias de esta dependencia, se le realizaron las pruebas de PCR tanto al mandatario como a aquellos que han estado cerca de él.
Las pruebas fueron realizadas pese a que “ninguno de los que fueron analizados mostraron previamente síntomas”, detalló la oficina de Netanyahu, sin aclarar la razón de por qué se les sometieron a las pruebas o si acaso existió alguna exposición al virus en alguno de ellos.
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Con ello, Netanyahu se unió a la lista de líderes mundiales que han tenido al COVID-19 a la puerta de su casa.
El sábado, la Casa Blanca confirmó que el presidente estadounidense Donald Trump se realizó la prueba y dio negativo al virus, lo que echó a tierra rumores sobre un posible contagio que el mandatario habría podido contraer desde la semana pasada tras estar en contacto con personas que han dado positivo al patógeno.
Un día antes, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó que tras realizarse la prueba, dio negativo al virus, también despejando rumores luego de que su secretario de prensa, Fábio Wajngarten, dio positivo al virus, con quien se reunió con Trump el pasado fin de semana.
En Canadá, Sophie Trudeau, la esposa del primer ministro Justin Trudeau, dio positivo al virus el pasado jueves, por lo que el premier canadiense se encuentra en aislamiento domiciliario. En tanto que en España, Begoña Gómez, esposa del presidente del gobierno Pedro Sánchez, dio positivo al patógeno el sábado.
Previamente este día, Netanyahu llevó a cabo su reunión semanal de gabinete vía teleconferencia con los funcionarios de su gobierno, como parte de las medidas de distanciamiento social que aplican en Israel, y también ha sostenido una junta con expertos para analizar formar para lidiar con la propagación del coronavirus en Israel.
Según el Ministerio de Salud, se han registrado 213 casos acumulados confirmados de COVID-19 en Israel hasta este día, la mayoría de ellos casos importados, es decir, personas que dieron positivo en el territorio nacional tras regresar de un país de riesgo. Cuatro de ellos se han recuperado, mientras que 195 se mantienen con síntomas leves, 12 con síntomas moderados y solo dos se encuentran en condición grave.
El gobierno de Netanyahu ha tomado ante ello medidas cada vez más drásticas de contención para detener la posible propagación de la enfermedad en el país. La dependencia sanitaria aseguró que el contagio del llamado paciente 29, del que las razones del mismo se desconocían y encendieron la alarma de un posible brote comunitario hace una semana, aparentemente se debió a que uno de los miembros de su familia se expuso a un paciente ya identificado.
El sábado se decidió el cierre de establecimientos comerciales a lo largo del país, como restaurantes, bares y centros nocturnos, salvo locales como supermercados o farmacias, y se instruyó la prohibición de reuniones de más de 10 personas, medida de distanciamiento social que se ha endurecido con el paso de los últimos días.
Asimismo, se decidió ampliar la suspensión total de instituciones educativas, que hasta el jueves incluía a las escuelas de educación básica, media y superior, para también abarcar los jardines de niños e instituciones escolares especiales.
Estas medidas se unen a la cuarentena obligatoria por 14 días que el gobierno ha decidido por las siguientes dos semanas para toda persona que llegue al país, sea ciudadano israelí o no. En caso de que sean extranjeros, deben de comprobar que pueden someterse al aislamiento, o de lo contrario no pueden ingresar al país.
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