Enlace Judío México e Israel – Una mujer israelí con necesidades especiales encarcelada en Perú bajo sospecha de contrabando de drogas, fue puesta bajo arresto domiciliario este domingo y se alojará con una familia judía local mientras espera su juicio.
Hodayá Monsonego, de 25 años de edad, con deterioro cognitivo, fue detenida junto con otro ciudadano israelí hace aproximadamente nueve meses en el aeropuerto de Lima, con 28 kilogramos de cocaína en su equipaje, informó el sitio de noticias Ynet.
Las autoridades peruanas aún no han fijado la fecha del juicio y el Ministerio de Justicia de Israel trabaja para conseguir el indulto.
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Su familia afirmó que los traficantes de drogas se aprovecharon de ella debido a su discapacidad cognitiva y que la cocaína no le pertenecía. La familia detalló que Hodayá viajaba por España cuando se encontró con un grupo de personas que le ofrecieron volar a América Latina y la utilizaron para el contrabando de drogas.
Maor Monsonego, hermano de Hodayá, explicó que la situación del coronavirus en Sudamérica, especialmente en Perú, preocupa a su familia y expresaron la esperanza de que la mujer fuera liberada pronto.
“Estamos muy preocupados, rezamos para que la dejaran salir de prisión”, expresó Maor.
Tehila, hermana de la joven, agregó que su familia está muy contenta con la decisión del tribunal de concederle el arresto domiciliario.
“Hablamos con Hodayá, y está emocionada, se siente y se la escucha bien. No sabemos muchos detalles pero en lo que a nosotros respecta, estamos trabajando en la solicitud de indulto”, manifestó Tehila.
El presidente Reuven Rivlin agradeció a las autoridades peruanas a través de su cuenta oficial de Twitter por permitir a la joven alojarse con la familia local y expresó su esperanza de que la medida sea un “paso hacia una pronta liberación”.
En febrero Rivlin escribió una carta al presidente de Perú, Martín Vizcarra, solicitando que concediera clemencia a Monsonego, quien sufre de “problemas médicos y ha sido diagnosticada con una capacidad cognitiva limitada”, que afecta su juicio, según un comunicado de la oficina del presidente.
Rivlin subrayó que la joven no tiene antecedentes penales y que es “razonable creer que su singular condición la llevó a involucrarse en el supuesto asunto sin intención”.
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