Enlace Judío México e Israel.- Dos días antes de la fecha objetivo de Netanyahu para comenzar a aplicar la soberanía israelí a partes de Judea y Samaria, la Plaza Donald Trump se encuentra embadurnada de falsa sangre.

Los residentes de Petaj Tikva en el centro de Israel se despertaron el lunes para encontrar la fuente en su Plaza Donald Trump emanando sangre falsa después de que vándalos añadieron tinte a las aguas en una protesta contra los planes de anexión de Judea y Samaria respaldados por Estados Unidos.

“La anexión nos costará en sangre”, se grafitó en rojo en el sitio, inaugurado el año pasado en honor al reconocimiento del presidente de los Estados Unidos en 2017 de Jerusalén como capital de Israel.

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El vandalismo fue el último de una serie de protestas contra los planes del gobierno de comenzar a anexar partes de Judea y Samaria a principios de esta semana, lo que generó temores de un nuevo estallido de violencia por parte de los palestinos enojados por el movimiento, que cortaría amplias franjas de su estado prospectivo, de acuerdo con la publicación de The Times of Israel.

“Hay pasos que no pueden dar marcha atrás. Nunca olvidaremos nuestros temores por los ataques terroristas de nuestra infancia”, dijeron los manifestantes detrás de la protesta al Canal 12, refiriéndose a las olas de violencia liderada por palestinos en los últimos 30 años.

“La anexión creará un desastre económico y de seguridad, y todo esto por parte de políticos que están jugando con fuego a expensas de los ciudadanos durante un período de crisis económica”, dijeron los organizadores, aparentemente refiriéndose a las amenazas de sanciones internacionales en respuesta a la anexión.

La protesta se produce dos días antes de la fecha de inicio declarada de anexión del primer ministro Benjamin Netanyahu, aunque no está claro si Israel avanzará con la medida y cuánto territorio buscará absorber.

Según los informes, las Fuerzas de Defensa de Israel han sido puestas en alerta máxima antes de la fecha objetivo, en medio de crecientes temores de que podría provocar violencia en Judea y Samaria.

Bajo un acuerdo de coalición entre Netanyahu y el líder de Kajol Laván Benny Gantz firmado el mes pasado, el gobierno puede buscar la anexión de los 132 asentamientos y el Valle del Jordán, el 30 por ciento de Judea y Samaria asignado a Israel bajo el plan de paz de la administración Trump, a partir de julio 1, aunque informes recientes indican que tal movimiento, en caso de que ocurra, puede aplicarse a un área de tierra mucho más pequeña. El plan también prevé condicionalmente un estado palestino en el 70% restante del territorio.

La posibilidad de anexión unilateral ha sido condenada internacionalmente, con estados europeos y árabes, así como con miembros de alto rango del Partido Demócrata estadounidense, advirtiendo al gobierno israelí contra la medida.

La plaza Donald Trump se encuentra cerca del edificio municipal de la ciudad e incluye una fuente con una escultura iluminada que incorpora las banderas israelí y estadounidense.

Un letrero en la plaza llama a Trump “el primero en reconocer a Jerusalén como la capital de Israel”.

También fue destrozado recientemente un cartel en la entrada de una nueva comunidad en los Altos del Golán, llamado así igualmente por el presidente de los Estados Unidos para agradecerle por reconocer la soberanía de Israel sobre el territorio, al que le han arrancado la mayoría de las letras.

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