Enlace Judío México e Israel – El gobierno de Israel aprobó este lunes una serie de restricciones en cuanto a restricciones y sitios públicos para intentar frenar el rebrote de coronavirus que se ha acelerado en los últimos días.

La decisión del gabinete limita los restaurantes a 20 clientes en áreas interiores y 30 personas en áreas de espacios abiertos, con mesas dispuestas a una distancia preventiva específica.

Todas las reuniones públicas tendrán un límite de 20 personas, con uso obligatorio de cubrebocas y una distancia de dos metros.

Todas las presentaciones culturales se cancelarán, y los salones de eventos, clubes, gimnasios, albercas públicas y bares serán cerrados. Los eventos deportivos organizados pueden continuar pero sin audiencia.

Los campamentos de verano y las escuelas de verano no se llevarán a cabo excepto para alumnos de jardín de niños y para aquellos del primero al cuarto grado de primaria.

Los autobuses solo podrán transportar 20 pasajeros a la vez, con ventanas abiertas y sin aire acondicionado.

Al menos el 30 por ciento de los empleados del sector público están obligados a trabajar desde casa.

El gabinete, que planeaba un cierre total de los sitios de culto, aceptó una propuesta del ministro del Interior, Aryeh Deri, para mantener abiertas las sinagogas, pero con una ocupación máxima de 19 personas, por debajo de las 50 actuales, de acuerdo con The Times of Israel.

El cierre de Yeshivás también fue retirado de la mesa en respuesta a la presión. Moshe Gafni, del partido Yahadut Hatorá, amenazó el domingo con retirar a su facción de la coalición de gobierno a menos que las Yeshivás permanecieran abiertas.

El gobierno permitió la reapertura de las sinagogas a fines de mayo luego de una presión pública. Las sinagogas sirvieron como vectores principales para la transmisión del coronavirus durante los primeros días de la pandemia.

Las nuevas restricciones aún tienen que ser aprobadas por el comité de coronavirus de la Knéset.

Israel está “a un paso de un cierre total”, habría dicho el primer ministro Benjamin Netanyahu a los miembros del gabinete gubernamental durante la reunión especial donde se decidieron las medidas, de acuerdo con reportes.

La decisión establece que dentro de las 48 horas, el Ministerio de Finanzas debe introducir un paquete de compensación para los perjudicados por las nuevas regulaciones.

Los nuevos casos diarios de virus, que habían caído a menos de dos dígitos durante la mayor parte de mayo, ahora alcanzan hasta 1,000 por día, y el número de casos activos está en un máximo histórico de más de 11,000.

El viceministro de Salud, Yoav Kisch, advirtió el domingo que la segunda ola de COVID-19 podría ser peor que la primera y que las reuniones masivas deben detenerse para disminuir la tasa de infección.

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