Enlace Judío México e Israel – Cinco manifestantes fueron atacados el martes por la noche por un grupo no identificado mientras cientos de personas protestaban cerca de la casa del ministro de Seguridad Pública, Amir Ohana, en Tel Aviv, contra la brutalidad policial y lo que consideran como intentos de reprimir las crecientes protestas contra el primer ministro Benjamín Netanyahu en las últimas semanas.

La protesta fue organizada por varios grupos, entre ellos el Movimiento de las Banderas Negras, que protesta regularmente frente a la residencia oficial de Netanayhau en Jerusalén, informó Haaretz.

El grupo dice que se opone a “la intromisión de Ohana en la labor de la Policía de Israel, para sofocar una protesta popular y no violenta”.

La semana pasada, Ohana pidió a la policía que evitara las protestas cerca de la residencia de Netanyahu en Jerusalén. En respuesta, los representantes de la ley citaron un fallo de la Corte Suprema que prohíbe evitar las manifestaciones.

Los organizadores de la protesta afirman que la política de represión de Ohana incluye la imposición de multas excesivas por no llevar cubrebocas.

“Lo que está sucediendo aquí es realmente aterrador”, expresó Naomi Beyth de Tel Aviv. “La presencia masiva de la policía se siente como si estuviera tratando de sofocarnos. El largo brazo de Ohana y Netanyahu está presionando a los manifestantes… Quiero dejar un mejor lugar para mis hijos”.

Los manifestantes relatan que fueron atacados por un grupo de personas que se infiltraron en la protesta. Los atacantes hirieron a los manifestantes con botellas de vidrio rotas, golpes, arrojaron sillas y los rociaron con gas de pimienta. Dos personas recibieron cortadas en el cuello, una de ellas requirió suturas.

Según los manifestantes, la policía ignoró sus peticiones de ayuda y sólo llegó al lugar de los hechos más tarde para desbaratar los enfrentamientos. Los atacantes, cuya identidad se desconoce y que pretendían ser parte de la protesta contra el gobierno, lograron huir de la escena.

Un manifestante que recibió atención médica mientras estaba tendido en el suelo dijo: “Vinieron a asesinarnos. ¿Dónde está la policía? A mi amigo lo atacaron con una botella en la cabeza y me rociaron con gas de pimienta en la cara”.

“Vinieron en un gran grupo y me golpearon mientras me tiraban botellas de vidrio rotas”, comentó otro manifestante.

Los atacantes, vestidos de negro, lanzaron piedras y atacaron a los manifestantes que marchaban desde el domicilio de Ohana hasta la vía de Ayalon, bloqueando brevemente algunas partes de la misma. De pronto el grupo comenzó a golpearlos sin ninguna provocación de su parte. Algunos testigos dijeron que los atacantes eran activistas de derecha que se colaron en las protestas, mientras que otros dicen que pertenecían a La Familia, una organización extremista de aficionados del equipo de fútbol Beitar Jerusalén.

“El grupo estaba lleno de odio. La gente tiene miedo de participar en las manifestaciones por esto. Es aterrador pensar que la próxima vez los atacantes usarán un cuchillo”, expresó otro manifestante.

Itamar Katzir, un reportero de Haaretz que estuvo en la escena y siguió a los desconocidos dijo, “sólo unos metros antes de la Cinemateca, vi a un manifestante que recibió un puñetazo en la cara con al menos 10 personas a su alrededor. Dos de ellos tenían banderas negras, pero parecía que buscaban problemas. Cuando llegué a la Cinemateca, empezaron a golpear a la gente al azar con sillas, botellas y banderas, y traté de atraparlos. La policía tardó mucho en llegar, no se dieron cuenta de que ese grupo andaba por ahí atacando a la gente”.

“Nuestro deber es permitir la libertad de protesta de cada ciudadano de acuerdo con la ley. Nuestro deber es trabajar por la aplicación de los derechos civiles de todos los ciudadanos de Israel, como hemos estado haciendo todos los días”, afirmó el comisionado de la policía Moti Cohen en respuesta a los sucesos.

“El bienestar del público y su seguridad son nuestra primera prioridad, y por lo tanto actuaremos con determinación contra cualquier tipo de violencia, vandalismo o daño a civiles y oficiales de policía. Hago un llamamiento a los manifestantes para que mantengan la protesta libre de violencia, sigan las órdenes de la policía y no permitan que las protestas se conviertan en violencia y en violación de la ley”, añadió.

“Vemos con gravedad cualquier tipo de violencia, ya sea dirigida a civiles o a agentes de la policía”, señaló la Policía de Israel en un comunicado. “Anoche, se organizaron protestas en todo Tel Aviv, que no fueron coordinadas con la policía. En un lugar, una fuerza policial vio un altercado y una persona sospechosa de lanzar piedras fue arrestada”.

La policía añadió que pedirá al tribunal prolongar la detención del sospechoso el miércoles.

“Hemos lanzado una investigación sobre el incidente y tenemos la intención de actuar en consecuencia contra todos los involucrados en la violencia”.

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