Enlace Judío México e Israel – En vista del aumento de contagios de coronavirus en Israel, el gobierno se prepara para aumentar en las próximas semanas el número de camas para atender a pacientes con COVID-19, de acuerdo con el sitio The Times of Israel.
El director general del Ministerio de Salud, Jezy Levy, dijo a directores de hospitales este miércoles que implementarán un plan para aumentar la capacidad nacional en 1,500 camas de hospital.
Según el Canal 12 israelí, se tendrían listas 750 camas adicionales para el 5 de octubre, y las 750 restantes para el 15 de octubre. De esas camas, el 20 por ciento serán para pacientes en estado crítico que estén intubados, mientras que el 80 por ciento restante será para aquellos en condición grave, moderada o leve.
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El reporte televisivo no especificó si algún centro médico en particular sería el objetivo de un aumento de camas.
El mes pasado, la Knéset recibió la noticia de que Israel logró aumentar su capacidad hospitalaria en solo 19 camas desde el comienzo de la pandemia de coronavirus hasta julio, y que las camas se estaban utilizando en otros departamentos.
Los hospitales también han advertido que el creciente número de personal médico en cuarentena ha creado una grave escasez de manos para atender a los pacientes. El Ministerio de Salud dijo el miércoles que 3,769 trabajadores de la salud se encuentran actualmente aislados.
Levy dijo a la estación Radio del Ejército que a medida que los hospitales se volvieran más congestionados, el nivel de atención para los pacientes con COVID-19 se deterioraría debido a sus complicados requisitos médicos.
“Para tratar a un paciente complejo como un paciente en estado grave con coronavirus, se requieren años de experiencia [médica]. A medida que aumenta su número, tememos que disminuya la calidad del tratamiento”, dijo Levy.
Un informe de agosto de expertos del Instituto de Ciencias Weizmann predijo que los hospitales solo podrían atender hasta 800 pacientes graves, un umbral que finalmente se cruzó el martes.
Según el Ministerio de Salud de Israel, el número de pacientes graves en este momento es de 810, de los que 205 están intubados a ventilación mecánica, y otros 293 están en estado moderado.
En un esfuerzo por reducir las crecientes tasas diarias de nuevas infecciones, que superaron las 8,000 diarios la semana pasada, un nuevo y radical confinamiento entró en vigor el pasado viernes.
Además, la Knéset aprobó este miércoles una controvertida medida para restringir las manifestaciones públicas, luego de una sesión legislativa que duró toda la noche en la que la oposición acusó al gobierno de dañar la democracia.
Si bien el gobierno había indicado inicialmente que el confinamiento duraría de dos a tres semanas, los funcionarios y el primer ministro han indicado en los últimos días que podría durar mucho más.
Actualmente suman 239,806 casos acumulados de coronavirus y 1,547 muertes, mientras los contagios activos han llegado a 65,149.
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