Enlace Judío México e Israel.- Israel vio casi 9.000 nuevos casos diarios de coronavirus después de que funcionarios médicos realizaran un número récord de pruebas, informó el jueves el Ministerio de Salud.
El primer ministro pidió que el sistema de salud se prepare para atender a 5.000 pacientes en estado grave, publicó World Israel News.
El Ministerio de Salud dice que 8,919 personas dieron positivo en coronavirus el miércoles, el más alto hasta el momento, después de las 68,128 pruebas realizadas que batieron récords, informó Ynet.
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Israel sigue siendo abatido por la resaca de la segunda ola de la pandemia de coronavirus.
El recuento general de portadores del virus confirmados se duplicó solo durante el mes de septiembre.
El número total de casos activos es de 68.811. Hay 810 casos graves, de los cuales 206 están con ventiladores. Israel ha dado mucha importancia al hecho de que 800 casos graves es una línea roja, lo que indica que las salas de corona están llenas.
El miércoles por la noche, el Canal 12 informó que al menos un hospital estaba devolviendo pacientes graves a sus hogares a pesar de que necesitaban la ayuda de respiradores para respirar.
El primer ministro Benjamin Netanyahu en una reunión del martes del gabinete de coronavirus dijo que el sistema de salud debe prepararse para un escenario de 5.000 pacientes en estado grave. Esto fue superior a su declaración del lunes por la noche en la que pidió aumentar el número de camas a 1.500 para el 1 de octubre.
El rápido cambio en las cifras está en consonancia con los pronósticos, directrices y normas en constante cambio del gobierno que tanto han exasperado al público israelí.
El primer ministro en esa reunión también pidió que se reduzca la distancia que las personas pueden desplazarse desde sus hogares de un kilómetro a 200 metros, algo que el gobierno votará el jueves.
El ministro de Defensa y primer ministro suplente, Benny Gantz, se opuso al endurecimiento.
“Estamos volviendo loco al país”, dijo Gantz. “Si la gente no obedece las instrucciones, no importa si son 100 metros, 200 metros o mil metros”.
A esto, Netanyahu respondió: “Tú no me dirás que estamos volviendo loco al público”.
El jueves, el gobierno aprobó mediante llamada varias restricciones nuevas, incluida la nueva ley de la Knéset que limita a los manifestantes a un kilómetro de sus hogares, una multa superior de 500 shekel a cualquiera que ingrese a una residencia que no sea su propia casa y una extensión de tres días del actual cierre.
Durante una semana, el gobierno ha prohibido todas las reuniones, manifestaciones, oraciones y ceremonias religiosas en espacios abiertos de más de 20 personas.
Los funcionarios del gobierno han estado preparando al público israelí para un bloqueo más prolongado que el actualmente en vigor, programado para expirar el 10 de octubre hasta la extensión de tres días.
El martes, Netanyahu dijo que el bloqueo por coronavirus podría durar un mes, con fuertes probabilidades de que continúe “por mucho más tiempo”.
El ministro de Salud, Yuli Edelstein, dijo el martes que “no hay escenario de que en 10 días levantemos todo y digamos ‘todo terminó, todo está bien”.
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