Los grados de primero a cuarto de las escuelas primarias, lugares de culto, salones de belleza y hoteles tipo B&B reanudaron actividades este domingo en Israel, en otro paso más de su proceso de desconfinamiento ante el control de la epidemia de COVID-19.

Unos 500,000 niños en todo el país regresaron a clase en cápsulas separadas de hasta 18 niños y se les pedirá que usen cubrebocas durante todo el día y coman al aire libre o separados unos de otros, de acuerdo con el sitio The Times of Israel. Las nuevas reglas entraron en vigencia a las 6 a. m. de este domingo.

Las cápsulas separadas se volverán a mezclar durante los programas de cuidado después de la escuela, una directiva que ha desconcertado y enojado a los padres.

Los niños de primero a cuarto grado estudiarán en la escuela durante al menos cuatro días a la semana, y varias autoridades locales dijeron que asignarían fondos para abrir escuelas cinco días a la semana.

El ministro de Educación, Yoav Gallant, abordó el tema de la desigualdad el domingo por la mañana y dijo que era una situación difícil.

“Es imposible ignorar el hecho de que hay lugares en Israel que pueden hacer más en virtud de su presupuesto. Las limitaciones sanitarias junto con las limitaciones presupuestarias dictan una determinada situación, y hacemos nuestro mejor esfuerzo”, dijo a la emisora ​​pública Kan.

Los niños de quinto grado y superiores continuarán con el aprendizaje vía remota desde casa por el momento.

Las escuelas permanecerán cerradas en localidades como Bu’eine Nujeidat y Majdal Shams en el norte de Israel, debido a sus altos niveles de contagio de coronavirus, pero las escuelas prescolares continuarán funcionando.

Se ha permitido también que los hoteles tipo B&B reanuden sus actividades a partir de hoy, pero solo las familias nucleares pueden permanecer juntas en dichos establecimientos, y los inquilinos no pueden usar las piscinas públicas o los comedores en las comunidades de las casas.

También se permitió que las estéticas y salones de belleza reabran, y es posible que se reinicien algunas actividades “individuales”, como lecciones de conducción y entrenamiento físico personal.

Sin embargo, los negocios callejeros permanecerán cerrados al menos hasta principios de la próxima semana, en una medida que ha indignado a los propietarios de pequeñas empresas y comerciantes.

Reconociendo el enojo de los comerciantes, el primer ministro Benjamín Netanyahu emitió un comunicado el viernes instándolos a “cooperar por unos días más” y prometiendo más ayuda económica.

El problema causó tensiones el viernes durante la reunión del gabinete del coronavirus en la que el ministro de Finanzas, Israel Katz, del Likud, se enfrentó con otros funcionarios, incluido Netanyahu, por las reaperturas de las tiendas.

Katz exigió la reapertura de las tiendas el domingo, mientras que Edelstein, el ministro de Salud, dijo que el gobierno debería acordar las decisiones de cierre por unanimidad y ceñirse al plan de reapertura que exigía medidas de relajación cada dos semanas.

Los ministros del gobierno decidieron la madrugada del viernes adelantar la reapertura de las sinagogas al domingo. Se suponía que las sinagogas permanecerían cerradas hasta el 15 de noviembre, según el plan original de reapertura. El número de fieles se limitará a 10 en el interior y 20 al aire libre.

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