Enlace Judío México e Israel – Desde la ordenanza de la Torá de que debe haber jueces y cortes que impartan justicia (pasando por la brillante idea que le dio Yitró a su yerno Moisés para organizar un verdadero sistema de judicatura), la figura del juez (dayán, en hebreo) ha evolucionado radicalmente en el Judaísmo.

Irving Gatell nos cuenta cómo desde los tiempos bíblicos hasta los modernos tribunales rabínicos, este oficio se ha sofisticado de un modo que nuestros ancestros difícilmente habrían imaginado, pero que ha garantizado que el modo judío de vivir se mantenga vigente. Mérito de gran calado, porque no sólo estamos hablando de que el Judaísmo sobrevivió a un exilio de más de 1800 años, sino a que los cambios a lo largo de la historia han sido tan grandes, que los sistemas legales antiguos han tenido que dejar su espacio a nuevas propuestas o alternativas.

No así en el pueblo judío. Su antiguo sistema legal y jurídico solamente ha evolucionado, y se mantiene activo y vigoroso, fortalecido con un bagaje histórico, cultural y espiritual que le permite enfrentar con renovado optimismo los nuevos retos que nos trae la modernidad.


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