Innovación Abierta- Frente a la idea del futuro incierto que experimentamos día a día, ocasionado principalmente por la pandemia por COVID-19, también existen noticias y oportunidades alentadoras que nos indican que, pese a las circunstancias que vivimos, tenemos la certeza de que la adopción de tecnología y la innovación en México y Latinoamérica son acciones que marcarán el progreso de la humanidad.

PHILIPPE SURMAN Y MARIO NISSAN, CO- FUNDADORES DE SMASH-OPEN INNOVATION ACCELERATOR

La innovación abierta, de acuerdo con el creador del término, el profesor Henry Chesbrough, es el uso de los flujos internos y externos de conocimiento para acelerar la innovación y ampliar los mercados para el uso externo de dicha innovación.

La innovación abierta tiene dos verticales:

a- De afuera hacia adentro: que consiste en abrir los procesos de innovación a ideas y aportaciones externas que permiten fortalecer los métodos y procesos originales. Este es el más utilizado por las empresas.

b- De adentro hacia afuera: este ha sido menos explorado y consiste en que las organizaciones permiten que sus ideas sean utilizadas por otras empresas e integrarlas a sus modelos de negocio.

Pese a la preferencia del modelo “a” en un inicio, la mayoría de las empresas que participan en procesos de open innovation (innovación abierta), están dispuestas a compartir y a recibir con el objetivo de fortalecer sus propios modelos y de apoyar a los demás aliados.

Un camino más seguro y rápido hacia el éxito

Estamos convencidos de que la aceleración en innovación abierta mediante la cual promovemos que las empresas vayan más allá de sus límites, a través de  la colaboración entre empresas multiregionales medianas y grandes con startups internacionales de tecnología que incorporan ventajas competitivas a su oferta de valor, permite alcanzar grandes resultados, inspira y motiva en estos tiempos en los que, más que nunca, compartir ideas, conocimientos, estrategias y modelos de negocio marcan la diferencia al trazar un camino más seguro y rápido hacia el éxito.

Aunque cada vez son más las empresas que confían en este modelo, este tipo de forma distribuida, descentralizada y participativa de innovar sigue siendo una ambición que aún no se ha hecho realidad en la mayoría de las empresas en México y Latinoamérica.

Frente a la crisis que la COVID-19 ha ocasionado, la innovación abierta ha ayudado a las organizaciones a encontrar nuevas formas de resolver problemas urgentes y, al mismo tiempo, a construir una reputación positiva.

Por ejemplo, Jim Hackett, presidente y director ejecutivo de Ford ha comentado que ha empoderado a sus ingenieros y diseñadores para que sean “ágiles y creativos” al colaborar con GE Healthcare para encontrar soluciones a la crisis.

Otro ejemplo ha sido la innovación abierta que ha provocado la transformación de las clases presenciales a virtuales; diversos sectores se han unido para apoyar e innovar en el sector académico con el objetivo de hacerlo más sencillo para docentes y estudiantes en todo el mundo.

Desafortunadamente, a pesar de los esfuerzos, en México la adopción de este tipo de modelos toma más tiempo, sin embargo, día a día hacemos grandes esfuerzos por acercar a nuestro país y a Latinoamérica a realidades que transforman las empresas de manera positiva, mediante la innovación abierta.

Es momento de ver hacia el futuro y de adoptar el modelo de innovación abierta como parte de nuestra realidad, sin importar el tamaño de nuestra empresa o negocio.

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