Efraim Palvanov – Benjamín de Tudela (1130-1173) nació en una familia religiosa sefardí en la ciudad de Tudela, hoy España. En 1165, partió en lo que se cree fue una peregrinación a Jerusalén. También tenía un objetivo más amplio en mente, ya que esto ocurrió en el apogeo de las Cruzadas y era un momento peligroso para cualquiera que hiciera una peregrinación, especialmente para los judíos. Benjamín quería explorar todas las comunidades judías a lo largo del camino y crear un mapa detallado que mostrara la ruta que uno debía tomar y donde un judío podía encontrar un refugio seguro en su viaje. Esto abriría la puerta para que más judíos hicieran un viaje a su amada Tierra Santa. Amante de la historia y la geografía, también quería dejar constancia de cómo era el mundo judío (y no judío) en el siglo XII. Registró todo lo que vio en su Sefer haMasa’at, “Libro de Viajes”, también conocido como Masa’aot Binyamin.

Sus aventuras fueron tan populares que pronto fueron traducidas a casi todos los idiomas europeos. Hoy en día, el libro es uno de los documentos históricos más importantes para los estudiosos de la Edad Media y el Renacimiento, así como de la historia judía y musulmana. Gran parte de lo que sabemos de esa época, incluyendo la vida cotidiana de la gente sencilla, proviene de su libro. Algunos creen que fue este libro el que pudo haber inspirado a otro aventurero más famoso un siglo después: Marco Polo.

Los viajes de Benjamín lo llevaron a Francia y a la península italiana, luego a Grecia y a través de lo que hoy es Turquía al Cercano Oriente, de vuelta a la península arábiga, a Egipto, y volviendo a Iberia a través del Norte de África. Mientras estaba en Etiopía, describe una gran comunidad judía, que era una fuente de información clave y permitió a los judíos etíopes de hoy en día ser aceptados por el Estado de Israel y el rabinato. Es posiblemente el primer escritor que detalla la comunidad de Al-Hashishin, más conocida como “Asesinos”, así como uno de los primeros en describir a los drusos.

En Posquières, conoce y describe al gran Raavad. En Roma, ve a un rabino Yejiel, que es consejero del Papa, y tiene “libre acceso al palacio del Papa”! Mientras está en Bagdad, escribe sobre el Califa, que es “como un Papa” para los musulmanes, y que el Califa habla hebreo con fluidez y conoce ampliamente la ley de la Torá, aunque gobierna con mano de hierro. En total, Benjamín de Tudela visitó y escribió sobre unas 300 ciudades. Hoy en día, hay calles con su nombre en Jerusalén y en Tudela, España, donde también hay un instituto que lleva su nombre.

Fuente: Jew of the Week