Enlace Judío –  El Comando Norte de las Fuerzas de Defensa de Israel realizó un ejercicio a gran escala a lo largo de la frontera norte esta semana simulando una guerra en Líbano.

El simulacro, denominado “Tormenta”, puso a prueba la capacidad del Comando Norte para responder rápidamente a los brotes de violencia en la frontera, dijeron las autoridades militares, de acuerdo con The Times of Israel.

El ejercicio se produjo una semana después de que Hezbolá presuntamente disparó misiles contra un dron del ejército israelí sobre el sur del Líbano y en medio de la advertencia de la Inteligencia Militar del ejército de que el grupo terrorista libanés podría intentar lanzar ataques.

Se llevó a cabo en el norte de Israel durante el martes y miércoles. Las tropas terrestres del Comando Norte participaron en el ejercicio junto con la Fuerza Aérea y la Armada de Israel, entre otras divisiones militares.

“El jefe de Estado Mayor de las FDI, el teniente general Aviv Kohavi, visitó el ejercicio [el miércoles] y verificó la preparación de las tropas en el campo para escenarios que involucran defensa y ofensiva, principalmente incidentes operativos que estallan en la frontera, una acumulación de fuerzas, utilizando rápidamente artillería y defendiendo a las comunidades del norte”, dijo el ejército israelí.

El simulacro también probó el nuevo sistema de las FDI para coordinar ataques, conocido como “Anillo de fuego”, dijeron los militares.

“Durante el ejercicio, se verificaron las lecciones aprendidas de los incidentes operativos recientes en la frontera libanesa, se refinaron los planes de batalla y se simularon los planes operativos que se preparan para la posibilidad de varios días de lucha y cooperación entre la recopilación de inteligencia, la fuerza aérea, la inteligencia y la artillería”, indicaron las FDI.

El Comando Norte de las FDI ha estado en alerta máxima a lo largo de la frontera libanesa desde el 20 de julio de 2020, cuando un operativo de Hezbolá fue asesinado en Siria en un ataque aéreo atribuido a Israel.

El grupo terrorista juró venganza e intentó cobrarla con dos ataques de francotiradores durante el verano, pero fracasó en ambas ocasiones. El ejército todavía cree que Hezbolá planea llevar a cabo un ataque en la frontera en represalia por la muerte de su militante.

“El ejercicio que realizamos ha contribuido en gran medida a mejorar nuestra preparación contra el ejército terrorista Hezbolá. Continuaremos aumentando la preparación de nuestras tropas y el cuartel general para los días de lucha, para aprender y mejorar, desde la comprensión de la necesidad de una acción ofensiva rápida y creatividad en el campo de batalla”, dijo sobre el ejercicio el comandante de la División de Galilea, el general Shlomi Binder.

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