Nuestro cerebro creció tras la extinción de la caza mayor: investigadores israelíes

Enlace Judío.- ¿Cómo se volvieron tan inteligentes los humanos prehistóricos? Sabemos que el volumen de nuestro cerebro creció de 650 cc a 1500 cc antes de la revolución agrícola aproximadamente en el año 10.000 a. C., pero hasta ahora nadie podía ofrecer una teoría unificada de por qué.

Los seres humanos se volvieron tan hábiles para cazar animales grandes que, finalmente, los animales se volvieron escasos y hubo que encontrar nuevas fuentes de alimento.

Investigadores de la Universidad de Tel Aviv, el Dr. Miki Ben-Dor y el profesor Ran Barkai, sugieren que la razón es que los humanos se volvieron tan hábiles para cazar animales grandes que los llevaron a la extinción. Esto supuso la necesidad de encontrar medios para cazar animales más pequeños, según el artículo publicado en Journal of Quaternary Science.

El tamaño promedio de los mamíferos terrestres era de 500 kg cuando los humanos se convirtieron en una especie, cuando comenzamos a cultivar, el tamaño se redujo a un 10% en promedio de lo que era.

La teoría destaca entre otras porque sugiere el crecimiento del lenguaje y las facultades del cerebro necesarias para la planificación a largo plazo, e incluso la imaginación, dentro de un marco. La caída en el tamaño de los animales grandes se observó en todas las áreas conocidas donde se sabe que los humanos han prosperado, publicó The Jerusalem Post.

“Relacionamos el aumento del volumen del cerebro humano con la necesidad de convertirnos en cazadores más inteligentes”, explica el Dr. Ben-Dor.

Cazar gacelas, por ejemplo, es más difícil que cazar un elefante grande, de los cuales el continente africano solía tener seis tipos diferentes antes de que los humanos los cazaran hasta casi extinguirse.

“La caza de animales pequeños, constantemente amenazados por los depredadores y, por tanto, muy rápidos para emprender el vuelo, requiere una fisiología adaptada a la caza así como herramientas de caza más sofisticadas”, explicó. También es bueno tener una memoria fuerte para recordar dónde les gusta beber a los animales o cuáles son sus patrones de migración.

“A medida que el tamaño de los animales siguió disminuyendo, la invención del arco y la flecha y la domesticación de los perros permitió una caza más eficiente de animales medianos y pequeños”, dijo el Dr. Ben-Dor, “hasta que estas poblaciones también disminuyeron”.

La teoría sugiere que los humanos estaban felices de cazar siempre que pudieran obtener suficiente comida de la energía invertida en ella. Cuando eso se volvió difícil cerca del final de la edad de piedra, pasaron a la agricultura.

“Mientras que el cerebro del chimpancé, por ejemplo, se ha mantenido estable durante 7 millones de años, el cerebro humano se triplicó, alcanzando su mayor tamaño hace unos 300.000 años”, dijo el profesor Barkai. Además, pensar en todas las cosas que los humanos inventaron durante ese momento. El fuego, herramientas, la domesticación de perros, el lenguaje, canciones e historias.

El neurobiólogo Idan Seguev, es el cerebro el que genera y controla la polifonía de nuestras emociones, la esencia de nuestra creatividad, la efusión de nuestras imaginaciones más descabelladas. El lenguaje, el pensamiento, el movimiento, el comportamiento y las creencias se originan en el cerebro.

El profesor Barkai añade que “nuestros primos los neandertales se extinguieron cuando desaparecieron sus grandes presas” mientras que el “homo sapiens decidió empezar de nuevo, esta vez apoyándose en la agricultura”.