Enlace Judío.- El miércoles, Estados Unidos expresó su desacuerdo con la acusación de Human Rights Watch de que Israel comete un “apartheid” contra los palestinos, pero se mostró comprometido a condenar los abusos.
“No es la opinión de esta administración que las acciones de Israel constituyen apartheid“, dijo un portavoz del Departamento de Estado después de un informe crítico del grupo de derechos de alto nivel..
Sin embargo, el Departamento de Estado del presidente estadounidense Joe Biden dijo que no “ofrecería evaluaciones públicas de informes de grupos externos”, un cambio de la administración de Donald Trump que reprendió en voz alta a los grupos de defensa que criticaron a su aliado Israel, según publicación de The Times of Israel.
También puede interesarte
El portavoz renovó un llamado tanto a Israel como a los palestinos a “abstenerse de acciones unilaterales que exacerben las tensiones”, incluida la actividad de asentamientos y la incitación a la violencia.
Human Rights Watch en un informe el martes dijo que Israel está “cometiendo los crímenes contra la humanidad del apartheid y la persecución”, y dijo que Israel tenía una política “general” para “mantener el dominio de los judíos israelíes sobre los palestinos”.
Israel, que enfrenta una investigación en la Corte Penal Internacional con la oposición de Estados Unidos, denunció el informe y acusó al grupo con sede en Nueva York de tener una agenda antiisraelí.
El embajador de Israel en Estados Unidos dijo que el informe estaba lleno de “mentiras y fabricaciones” que “rozaban el antisemitismo“.
Human Rights Watch “es conocido por tener una agenda antiisraelí de larga data”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores. “Las afirmaciones ficticias que HRW inventó son absurdas y falsas”.
Israel ha negado rotundamente durante mucho tiempo las acusaciones de apartheid, diciendo que su minoría árabe disfruta de plenos derechos civiles, así como el término “ocupación” para describir sus actividades en Cisjordania y Gaza. Considera a Gaza, de la que retiró soldados y colonos en 2005, una entidad hostil gobernada por el grupo terrorista islámico Hamas, y considera que Cisjordania es un territorio en disputa sujeto a negociaciones de paz, que colapsó hace más de una década.
En Gaza, el bloqueo israelí impuesto tras la toma de poder del grupo terrorista Hamas ha confinado en gran medida a 2 millones de palestinos a la franja costera, lo que ha diezmado la economía. Israel impone fuertes restricciones a la circulación de personas y mercancías dentro y fuera de Gaza, al igual que el vecino Egipto, y sostiene que el bloqueo es necesario para evitar la entrada de armas que puedan dirigirse contra los residentes del sur de Israel. Israel y Hamas, que juró la destrucción del estado judío, han librado varias batallas a gran escala y muchas más pequeñas en la última década.
Israel también señala la existencia de la Autoridad Palestina reconocida internacionalmente, que administra partes de Cisjordania en virtud de los Acuerdos de Oslo.
Los acuerdos alcanzados en la década de 1990 tenían la intención de ser temporales, a la espera de un acuerdo de paz histórico que establecería un estado palestino en la mayor parte de Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este. Israel capturó Jerusalén Este y Cisjordania de Jordania y la Franja de Gaza de Egipto en la Guerra de los Seis Días de 1967, tierras que albergan a casi 5 millones de palestinos y que los palestinos quieren para un estado futuro. Pero el acuerdo de paz parece estar más lejos de su alcance que en cualquier otro momento de las últimas tres décadas.
AP contribuyó a este informe.
Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío
