Enlace Judío – La postura norteamericana en el marco de las Naciones Unidas enciende preguntas.
Se esperaba en Israel que, en contraste con el periodo presidencial de Donald Trump, Joe Biden exhibiría una postural hostil. No fue ni es así. Se limitó a pedir un rápido término de las hostilidades y el inicio de gestiones orientadas a restaurar un equilibrio relativamente estable entre las partes.
Actitud que implica un franco reconocimiento del derecho de Israel a defenderse.
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Cabe apuntar que tanto Israel como Gaza revelaron —tanto en la agresión como en la defensa— un alto dominio de los avances de la cibernética en materia militar. La destrucción de más de 15 kilómetros de túneles construidos por el Hamás en los últimos años y la muerte de una decena de sus líderes es una de las expresiones de este hecho.
Se estima que la reconstrucción de lo destruido exigirá por lo menos 10 años y múltiples recursos que probablemente serán ofrecidos por Catar y por organismos internacionales.
Al tiempo que Israel continúa la actividad aérea en Gaza también debe atender dos nuevos hechos.
El primero alude a la tragedia ocurrida en el sector jerosolimitano de Giva’at Ze’ev. Por la festividad de Shavuot, una muchedumbre religiosa ocupó palcos en un estrecho espacio que se derrumbó antes de iniciar las oraciones. Resultaron 2 muertos y un centenar de heridos.
Como en el caso del desastre verificado hace algunas semanas en Merón, las autoridades deberán investigar el origen de esta nueva tragedia.
El segundo hecho apunta a la huelga concertada por no pocos ciudadanos de origen árabe que hoy se ausentaron de sus lugares de trabajo en señal de solidaridad con la trágica suerte de no pocos habitantes de Gaza.
En algunos de ellos se resolvió despedirlos, medida que —a mi ver— apenas indica comprensión con los motivos que los animan.
En suma: escenas y circunstancias que deben ser consideradas en su momento por el gobierno y la pública opinión de Israel.
Las opiniones, creencias y puntos de vista expresados por el autor o la autora en los artículos de opinión, y los comentarios en los mismos, no reflejan necesariamente la postura o línea editorial de Enlace Judío.
