Enlace Judío.- Según los informes, Egipto ha invitado a Israel, la Autoridad Palestina y Hamas a El Cairo a una cumbre para discutir un alto el fuego a largo plazo entre Israel y Gaza luego de una tregua negociada por Egipto que recientemente puso fin a un estallido militar de 11 días entre Israel y los gobernantes de Gaza, el grupo terrorista palestino Hamas.
La cumbre propuesta abordaría también el regreso de civiles israelíes cautivos y cuerpos de soldados de las FDI retenidos desde 2014
El objetivo de la cumbre sería llegar a un acuerdo sobre la reconstrucción de Gaza, así como de un alto el fuego que se mantendría a largo plazo y discutiría el regreso de civiles israelíes y los cuerpos de dos soldados de las FDI cautivos durante casi siete años. La emisora Kan de Israel informó (hebreo) el miércoles, según recogió The Times of Israel.
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Los soldados de las FDI Hadar Goldin y Oron Shaul murieron en la guerra del verano de 2014 con Hamas, mientras que el civil Avera Mengistu fue capturado tras ingresar a Gaza por su propia voluntad en el mismo año. Según los informes, Mengistu sufre problemas de salud mental. Hisham al-Sayed, un segundo civil, ingresó a la Franja en 2015 y ha estado detenido allí desde entonces.
Según el informe, un oficial militar egipcio anónimo viajó a Israel la semana pasada para discutir la iniciativa, pero no se ha fijado fecha para la cumbre propuesta. Kan informó además que Israel estableció dos condiciones para su acuerdo de asistencia: que las conversaciones con Hamas y la Autoridad Palestina se celebren por separado, y que cada paso en el proceso de reconstrucción de Gaza esté vinculado al avance del regreso de los cautivos.
Israel ha trabajado a lo largo de los años para asegurar la liberación de los cuerpos de los soldados y de los civiles, a menudo utilizando como intermediario al ejército egipcio, que mantiene vínculos con Jerusalén y Hamas. Hamas ha buscado, a cambio, la liberación de prisioneros de seguridad palestinos en cárceles israelíes, tanto miembros de Hamas como de otros grupos terroristas. Algunos de los prisioneros ya habían sido liberados durante el acuerdo de intercambio de prisioneros de 2011, pero fueron arrestados nuevamente durante la represión de 2014 contra el grupo terrorista en Judea y Samaria (Cisjordania) tras el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes.
Actualmente, se están realizando esfuerzos diplomáticos para solidificar la frágil tregua negociada por Egipto que detuvo los combates recientes, con planes para reconstruir la Franja de Gaza, donde los ataques aéreos israelíes dañaron la infraestructura y arrasaron edificios.
El Cairo ha enviado delegaciones tanto a Tel Aviv como a Gaza para vigilar la implementación del alto el fuego, y también ha estado coordinando la ayuda internacional de socorro y reconstrucción para el enclave, que ha estado bajo bloqueo israelí y egipcio durante casi 15 años para evitar que Hamas construya infraestructura terrorista.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, visitó Jordania el miércoles, concluyendo una gira de dos días por el Medio Oriente que tenía como objetivo apuntalar el alto el fuego.
Después de reunirse antes con el presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sissi, a quien elogió por ayudar a poner fin a la intensa violencia “relativamente rápido”, voló a Jordania, donde la mitad de los 10 millones de habitantes es de origen palestino.
Blinken se reunió con el rey Abdullah II, luego de dos días de conversaciones regionales, incluso con líderes israelíes y palestinos, para brindar el apoyo de Washington a la tregua.
“Asegurar el alto el fuego fue importante, particularmente debido al devastador número de víctimas de la violencia en las familias de ambos lados”, dijo Blinken a los periodistas después de reunirse con el monarca jordano en Ammán, su última parada.
“Vemos el alto el fuego no como un final, sino como el comienzo de algo sobre lo que construir”.
Tras las conversaciones con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, en su sede en la ciudad cisjordana de Ramallah, Blinken prometió reconstruir las relaciones de Estados Unidos con los palestinos reabriendo un consulado en Jerusalén, así como otorgar millones en ayuda para la Franja de Gaza devastada por la guerra.
Los anuncios marcaron una ruptura con la política estadounidense bajo el expresidente Donald Trump, quien había cerrado la misión diplomática para los palestinos en 2019 y recortado la ayuda a la Autoridad Palestina.
A largo plazo, Blinken evocó la “posibilidad de reanudar el esfuerzo para lograr una solución de dos estados, que seguimos creyendo que es la única manera de asegurar verdaderamente el futuro de Israel como un estado judío y democrático y, por supuesto, dar a los palestinos el estado al que tienen derecho.
Después de reunirse con el primer ministro Benjamin Netanyahu, reiteró su apoyo al derecho de Israel a defenderse de los ataques con cohetes de los gobernantes de Hamas en Gaza, y agregó que no deben beneficiarse de la ayuda para la reconstrucción.
El jefe político de Hamas, Yahya Sinwar, prometió el miércoles no tomar “un solo centavo” de la ayuda, insistiendo en que “nunca hemos tomado un centavo en el pasado”.
La reconstrucción de Gaza
El miércoles, después de reunirse con al-Sissi, Blinken dijo más tarde que ambos “creen firmemente que los palestinos y los israelíes merecen igualmente vivir en condiciones de seguridad” y que “Egipto es vital para estas aspiraciones”.
A diferencia de Estados Unidos y muchos gobiernos europeos, que boicotean al grupo terrorista Hamas, Egipto mantiene contactos regulares.
La semana pasada, Sissi prometió 500 millones de dólares para ayudar a los esfuerzos de reconstrucción en Gaza.
Blinken dijo el miércoles que Estados Unidos estaba en el proceso de proporcionar más de $ 360 millones en asistencia a los palestinos, incluidos $ 250 millones anunciados en marzo y abril.
Además de eso, la administración tenía la intención de proporcionar $ 75 millones en ayuda a los palestinos, así como $ 5,5 millones en asistencia inmediata por desastre para Gaza, y casi $ 33 millones para un llamamiento humanitario de emergencia de la ONU.
La última escalada militar comenzó cuando Hamas lanzó cohetes contra Jerusalén después de los enfrentamientos entre palestinos y agentes de policía israelíes en el Monte del Templo.
Las fuerzas de seguridad israelíes también habían tratado de sofocar las protestas contra la amenaza de desalojo de familias palestinas de sus casas en el barrio de Sheikh Jarrah en Jerusalén Oriental para dar paso a familias judías que alegan que son propiedad judía.
El lanzamiento de cohetes y otros proyectiles desde Gaza se cobró 13 vidas en Israel, incluido un niño y un adolescente, un soldado israelí, un ciudadano indio y dos trabajadores tailandeses, dicen los médicos. Unas 357 personas en Israel resultaron heridas.
Los ataques aéreos israelíes y el fuego de artillería en Gaza mataron a 254 palestinos, incluidos 66 niños, e hirieron a más de 1.900 personas en 11 días de conflicto desde el 10 de mayo, dice el Ministerio de Salud de Gaza. Israel afirma que más de 200 de los muertos eran agentes terroristas.
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