Enlace Judío – El Ejército alemán tiene desde hoy a su primer rabino en 100 años, en un símbolo de la renovación de la vida judía décadas después del Holocausto.

Sacerdotes católicos y pastores protestantes brindan servicios religiosos a los aproximadamente 94,000 cristianos en el Ejército alemán.

Pero el equivalente no ha estado disponible para los soldados judíos, que suman alrededor de 300, de acuerdo con la AFP.

Zsolt Balla, de 42 años, nacido en Hungría, asumió el cargo de rabino del Ejército alemán este lunes, subrayando lo que describió como una “responsabilidad histórica” de servir a los soldados judíos.

Padre de 3 hijos, le dijo a la emisora ​​pública Bayerischer Rundfunk que quería que se sintieran “tan integrales” a las fuerzas armadas como sus contrapartes en países como EE. UU., Reino Unido y Francia.

“Ese es nuestro objetivo”, dijo Balla, que vive en Alemania desde 2002.

Balla dijo que esto incluía trabajar para erradicar el antisemitismo y otras formas de odio de las filas de las fuerzas armadas “con buen trabajo, conversaciones e intercambio”.

Dijo que continuará sirviendo a su congregación en Leipzig, en la junta de la conferencia de rabinos ortodoxos y como rabino estatal de Sajonia, junto con sus responsabilidades militares.

La ministra de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer, anunció los planes en diciembre de 2019, diciendo que con ello quería enviar “un mensaje importante a nuestros soldados judíos” y enfatizó que “la vida judía es evidente en nuestro país”.

Los consejeros religiosos del Ejército ofrecen asesoramiento sobre cuestiones éticas y acompañan a los soldados en su formación o formación continua.

Está previsto que más rabinos militares se unan a Balla en el futuro, y hay planes para poner en marcha un consejero religioso para los 3,000 soldados musulmanes.

Sin embargo, las conversaciones se han retrasado porque no existe una institución coordinadora central que represente a la comunidad.

A lo largo de los años, las fuerzas armadas de Alemania han sido criticadas repetidamente por sospechas de que algunos miembros simpatizan con la extrema derecha.

En 2018, la entonces ministra de Defensa, Ursula von der Leyen, ordenó al Ejército que depurara todos los vínculos con las fuerzas armadas de la era de la Alemania nazi, después de enterarse de que en uno de sus cuarteles se mostraban cascos de acero y objetos de interés de estas.

Más recientemente, Kramp-Karrenbauer prometió tomar medidas decisivas contra los casos de radicalismo en las fuerzas seguridad después de una serie de escándalos sobre redes de extrema derecha en la Policía y el Ejército.

El Servicio de Contrainteligencia Militar de Alemania dijo que el año pasado unos 600 soldados del Ejército fueron sospechosos de extremismo de derecha.

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