Enlace Judío México e Israel / Efraim Palvanov – Bertha Pappenheim (1859-1936) nació en Viena en el seno de una familia judía rica y religiosa de origen austriaco y alemán. Su padre fue uno de los fundadores de la famosa Schiff Shul de Viena, la mayor sinagoga ortodoxa de la ciudad (destruida posteriormente durante la Kristallnacht). A los 16 años, dejó la escuela para ocuparse de su casa y de su padre enfermo. Por aquel entonces, empezó a desarrollar problemas psicológicos y emocionales y fue tratada por el médico austriaco Josef Breuer, junto con su alumno Sigmund Freud. Su caso (conocido como “Anna O”) desempeñaría un papel importante en el desarrollo de la psicología y el psicoanálisis.

Cuando Pappenheim se recuperó, se trasladó con su madre a Fráncfort y ambas se convirtieron en grandes mecenas de las artes y la ciencia en la ciudad. Ayudaron a fundar la Universidad de Fráncfort y se forjaron una reputación de filántropas generosas. Pappenheim intensificó sus estudios, comenzó a escribir y se involucró en la política. Fue voluntaria en un comedor social y en un orfanato judío. Llegó a ser directora del orfanato y lo transformó en un lugar en el que las niñas judías podían aprender habilidades reales y ser independientes.

Pappenheim escribió mucho sobre los derechos de la mujer y trabajó con diligencia para combatir el tráfico de mujeres. Fundó la Asociación de Mujeres Judías (Jüdischer Frauenbund, o JFB), que rápidamente llegó a tener unos 50,000 miembros y se convirtió en la organización de beneficiencia judía más grande del mundo. Pappenheim también fundó numerosos jardines de infancia, orfanatos y refugios para mujeres que habían sido víctimas de la trata o de abusos. Estas instituciones eran estrictamente kosher y observaban el Shabat, ofrecían cuidados cálidos, educación, formación profesional e instrucción religiosa.

Pappenheim colaboró con Henrietta Szold, fundadora de Hadassah, y con Sarah Schenirer, pionera del movimiento Beit Yakov de escuelas para niñas. Escribió varias obras de teatro, libros de poesía, novelas y cuentos infantiles. También tradujo partes del Talmud, el Midrash y el Tanaj para mujeres, además de otros textos importantes. En 1954, Alemania emitió un sello postal con la imagen de Pappenheim en su serie “Benefactores de la Humanidad”.

Fuente: Jew of the Week

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