Enlace Judío.- El miércoles se presentó una acusación contra la exdiputada de Balad Hanin Zoabi, así como contra otros 12 acusados, algunos de los cuales ocuparon cargos oficiales en el Partido Balad en el pasado, por cargos de fraude y falsificación.
Esto se produce tras el anuncio del fiscal general Avijai Mandelblit en abril de su decisión de procesar a la exmiembro de la Knéset.
La acusación es parte de un acuerdo de culpabilidad, en el que los acusados confesarán y serán condenados por los delitos que se les atribuyen, y solicitarán la imposición de las penas acordadas, incluidas las penas de prisión que se extenderán a través de trabajo de servicio, trabajo de beneficio público, libertad condicional, así como multas que oscilan entre 25.000 y 75.000 NIS, según publicación de The Jerusalem Post.
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Zoabi fue investigada junto con otros 35 sospechosos, incluidos altos funcionarios en ese momento en el Partido Balad, por falsificación y fraude en relación con los documentos de denuncia del Partido Balad que se presentaron al Contralor del Estado, en dos campañas electorales generales y locales en 2013.
Tras la firma de un acuerdo de culpabilidad con algunos de sus miembros, Balad lo acogió con satisfacción, afirmando: “La firma del acuerdo de culpabilidad con 13 miembros del partido junto con la decisión del fiscal general de cerrar el caso penal contra la parte contraria a la opinión de la fiscalía, prueba nuestro clamor desde el primer día de que se trata de una persecución política del partido y sus miembros”.
Los sospechosos en el caso fueron acusados colectivamente de planificar un plan de fraude para recibir NIS 3,2 millones sin informar adecuadamente sobre los fondos de acuerdo con las leyes de financiación de campañas.
La falsificación y los documentos fraudulentos supuestamente se presentaron ante la Contraloría del Estado como parte de las obligaciones de las partes de cumplir con las leyes de financiamiento de campañas y supuestamente continuaron durante tres años, de 2013 a 2016.
En conjunto, se sospechaba que los acusados habían presentado la asombrosa cantidad de 1.300 recibos falsificados para respaldar sus presentaciones de financiamiento de campaña falsas.
Los cargos indicaron que los funcionarios dejaron señales de haber creado los documentos en 2015-2016, a pesar de que se presentaron como documentos que datan de 2013.
Aunque la verdadera fuente ilegal de las donaciones de la campaña parecía estar encubierta, Zoabi y los funcionarios del partido supuestamente presentaron las donaciones como un gran volumen de pequeñas donaciones permitidas.
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