Enlace Judío – El ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, afirmó este martes que el país está preparado para ayudar al Líbano en medio de su creciente crisis financiera, pero que al mismo tiempo no aceptará más ataques en su frontera, luego de que un aluvión de cohetes fue disparado contra el norte de Israel por el grupo terrorista Hezbolá, informó The Times of Israel.
“La crisis en el Líbano es devastadora. El Estado de Israel pide a la comunidad internacional que ayude al Líbano. También estamos dispuestos a brindar asistencia. Sin embargo, no permitiremos que la tragedia del Líbano cruce la frontera hacia Israel”, dijo Gantz en una visita al Comando Norte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
El Líbano está lidiando con fuertes golpes a su economía y el gobierno está discutiendo el levantamiento de los subsidios que ya no puede pagar, en medio de lo que, según el Banco Mundial, es una de las peores crisis financieras desde la década de 1850.
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La moneda local ha perdido más del 90% de su valor en el mercado negro, y las compañías eléctricas estatales libanesas están proporcionando menos de 5 horas de electricidad al día en la mayoría de las áreas, ya que luchan por obtener la moneda extranjera para importar combustible.
El viernes pasado se lanzaron 19 cohetes contra los Altos del Golán y Galilea desde el Líbano. Las FDI dijeron que 10 proyectiles fueron interceptados por el sistema de defensa Cúpula de Hierro y 6 aterrizaron en áreas abiertas alrededor del monte Dov. Otros 3 cohetes no lograron cruzar la frontera y aterrizaron en territorio libanés.
Fue el bombardeo más intenso de Hezbolá desde la Segunda Guerra del Líbano de 2006. El grupo dijo que se produjo en respuesta a los recientes ataques aéreos israelíes en el Líbano. “La resistencia islámica bombardeó áreas abiertas cerca de las granjas Shebaa con docenas de cohetes de 122 mm”, dijo en un comunicado difundido en medios de comunicación en idioma árabe.
“Somos muy conscientes de los intentos de Hezbolá de explotar la situación a expensas de la seguridad y los medios de vida de los ciudadanos libaneses, bajo la influencia directa de Irán“, dijo Gantz el martes.
Refiriéndose al reciente ataque mortal con aviones no tripulados contra el petrolero Mercer Street cerca de Omán, vinculado a Israel, ampliamente atribuido a Irán, el ministro de Defensa dijo que “tal como vimos en el ataque marítimo, que se cobró la vida de dos ciudadanos extranjeros, Irán es la mayor amenaza para la paz mundial y regional. Israel no se quedará al margen mientras Irán avanza en su programa nuclear”.
“Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que actúe y detenga la agresión iraní. Este es el momento de la acción conjunta”, dijo.
Gantz y el ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, nombraron la semana pasada al comandante iraní que dijeron que estaba detrás del ataque al petrolero Mercer Street. Murieron 2 tripulantes, un británico y un rumano.
El ministro de Defensa dijo que Israel responderá a la agresión iraní en el momento que elija. Después de que el jefe de la Guardia Revolucionaria Iraní, Hossein Salami, hablara el sábado de una “ecuación de respuesta” con respecto a Israel, Gantz declaró: “Aquellos que se han acostumbrado a las ecuaciones deben entender que lo que ha sucedido en el pasado no es necesariamente lo que será en el futuro, y deberían hacer los cálculos”.
Al mismo tiempo, en una ceremonia naval en Haifa por la llegada de 2 nuevas corbetas Sa’ar 6, el presidente israelí Yitzhak Herzog también amenazó a quienes intentan dañar a ciudadanos israelíes, señalando a Irán.
“En las últimas semanas, hemos sido testigos del intento de Irán de dañar objetivos israelíes, incluso en el frente marítimo. Este no es solo un asunto israelí. El mundo entero ha visto los resultados de la agresión de Irán contra civiles inocentes”, dijo Herzog.
“Solo el fin de semana pasado, volvimos a ver la actividad de Irán y sus afiliados en la frontera norte”, dijo sobre los ataques con cohetes. “Si alguien en el Líbano cree que puede amenazarnos, está cometiendo un amargo error”.
Herzog dijo que Israel no aceptará que sus ciudadanos sean atacados y amenazó con que “quien intente hacernos daño, en cualquier lugar, en teatros cercanos y lejanos, directa o indirectamente, sentirá nuestro poder y fuerza”.
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