Enlace Judío.- Casi 2,5 millones de alumnos israelíes desde jardín de infantes hasta 12° grado comenzaron el año escolar el miércoles a pesar de los números récord de virus. Los funcionarios reconocen que el regreso a clase podría provocar un aumento adicional de las infecciones.
La reapertura de las escuelas podría ver un aumento adicional en las cifras de virus ya récord, pero el país está decidido a mantener abierto el sistema educativo. 250.000 niños perderán el primer día de clase
El director general del Ministerio de Salud, Nachman Ash, dijo que la prioridad era mantener la economía abierta y hacer que los niños regresaran a la escuela, y agregó que esperaba que una serie de nuevas medidas implementadas redujeran los riesgos, publicó The Times of Israel.
También puede interesarte
“No creo que sea una apuesta”, dijo Ash a las noticias de Canal 12 el martes por la noche. “Creo que estamos tomando una decisión informada de acuerdo con la política del gobierno. Queremos mantener abierta la economía y el sistema educativo”.
Sin embargo, admitió que la reapertura probablemente causaría un aumento temporal en el número de nuevos casos de COVID.
“Habrá un aumento con la apertura de las escuelas, pero espero que veamos una reversión de la tendencia en la próxima semana”, dijo, señalando los kits de prueba rápida que se entregan a los padres y la política de limitar las clases presenciales en áreas de alta infección si el 70 por ciento de los estudiantes no están vacunados o tienen pruebas negativas.
El martes por la noche, la ministra de Educación, Yifat Shasha-Biton, celebró una conferencia de prensa para dirigirse a los padres, estudiantes y maestros del país antes del comienzo de la escuela. En sus comentarios, advirtió que el último modelo para la reapertura de escuelas en persona puede tener que adaptarse, dependiendo del número de casos en las próximas semanas y meses.
“Aprecio el esfuerzo conjunto que nos permitió lograr nuestro objetivo de abrir el año escolar [a tiempo]”, dijo Shasha-Bitton. “Algunos padres tienen preocupaciones y sé que no será fácil, pero tenemos la obligación moral de traer a los niños de regreso a la escuela. Les debemos esto como sociedad.
“Juntos hemos construido un programa que garantizará un regreso lo más seguro posible para los alumnos y garantizará una rutina y continuidad de estudio”, continuó la ministra, y agregó que su oficina “no dudará en cambiar y adaptar el programa de acuerdo con la realidad en evolución.
“El sistema educativo es la solución, no el problema”, dijo.
Shasha-Biton dijo que su oficina se enfocaría este año en reducir las brechas en el progreso creadas entre los estudiantes como resultado de la pandemia durante el último año y medio.
“Enfatizaremos los aspectos emocionales y sociales de nuestros estudiantes porque son la infraestructura para un aprendizaje óptimo. Un niño que no está [emocionalmente] disponible para aprender no tendrá éxito”, dijo.
Shasha-Biton dijo que unos 18.000 profesores del sistema educativo no están vacunados, junto con otros 18.000 profesores asistentes y otro personal educativo, y los instó a que lo hicieran. “Es una cuestión de ejemplo y compromiso personal”, dijo.
El personal que no esté vacunado debe someterse a pruebas cada pocos días o no se le permitirá trabajar.
La ministra no descartó la posibilidad de que las escuelas deban cerrarse si la morbilidad se propaga, como sucedió varias veces el año pasado. “Las cosas deben abordarse de manera específica. Vigilaremos constantemente lo que está sucediendo en el sistema educativo”, dijo, y agregó que su oficina tiene la obligación de brindarles a los niños una rutina.
Según el plan del Ministerio de Educación para reabrir escuelas en medio de la pandemia en curso, las guarderías, los centros preescolares y los grados uno y dos realizarán un aprendizaje presencial regular cinco días a la semana en las ciudades designadas como verdes, amarillas o naranjas según sus cifras de coronavirus.
En las ciudades designadas como rojas debido al alto número de casos, las guarderías, los centros preescolares y los grados uno a cuatro aún podrán continuar con clases presenciales. Sin embargo, se requerirá que los grados del quinto al séptimo den las clases al aire libre o en grupos pequeños. Los grados ocho a 12 estudiarán al aire libre si menos del 70% de los alumnos están exentos de cuarentena gracias a la vacunación o la recuperación.
Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío
