Enlace Judío.- Un informe del viernes afirmó que la Autoridad Palestina había acordado cooperar con la persecución israelí de seis reclusos que escaparon de la prisión a principios de esta semana, algunos de los cuales se cree que se esconden en Cisjordania.
Abbas parecía reacio a ayudar a capturar a los populares fugitivos, pero un informe en un periódico libanés vinculado a los rivales de Ramallah afirma que la Autoridad Palestina se siente presionada para reprimir los disturbios.
Si el informe del periódico libanés al-Akhbar es correcto, marcaría un cambio radical para Ramallah, que se había unido al abrumador coro de apoyo a los seis fugitivos en la calle palestina y se consideraba poco probable que tuviera la voluntad política de cooperar con Israel trayéndolos.
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Para Israel, que ha luchado por rastrear el paradero de los ex detenidos y ha enfrentado un recrudecimiento de la violencia relacionado con la fuga, la ayuda de la Autoridad Palestina proporcionaría un impulso bienvenido para llegar a ciertas áreas de Cisjordania, publicó The Times of Israel.
Según el informe de al-Akhbar, basado en una fuente anónima de la Autoridad Palestina, a principios de esta semana se llegó a un acuerdo que verá a la Autoridad Palestina cooperar para encontrar a los fugitivos, a cambio del compromiso israelí de capturarlos vivos y aliviar las condiciones de los miles de palestinos que permanecen encarcelados en Israel.
No hubo comentarios de las autoridades israelíes sobre el informe.
Se considera al periódico estrechamente vinculado tanto a Hezbolá como a Hamas, que es un rival de la Autoridad Palestina y a menudo la acusa de traicionar la causa palestina cooperando con las agencias de seguridad israelíes.
Los seis palestinos escaparon de la prisión de alta seguridad Gilboa en el norte de Israel en las horas previas al amanecer del lunes por la mañana, abriéndose camino a través del sistema de drenaje de su celda en una de las fugas de prisión más graves en la historia del país, que provocó una persecución masiva en el norte de Israel y Cisjordania.
Cuatro de los seis fugitivos estaban en la cárcel de por vida en relación con ataques mortales contra israelíes; el sexto, un notorio comandante del grupo terrorista Brigada de los Mártires Al-Aqsa de Fatah, Zakaria Zubeidi, estaba en prisión mientras era juzgado por dos docenas de delitos, incluido el intento de asesinato. Otro estuvo en detención administrativa.
La policía cree que algunos de los sospechosos pueden haber huido del país hacia Jordania, mientras que la emisora pública Kan informó el jueves que las autoridades creen que varios de ellos todavía están en Cisjordania y reciben ayuda de palestinos locales.
Las tensiones han aumentado desde la fuga de la prisión, ya que las tropas israelíes llevaron a cabo redadas durante las búsquedas de los fugitivos y las autoridades tomaron medidas para trasladar a los prisioneros de alta seguridad a diferentes instalaciones y a miembros separados del grupo terrorista Jihad Islámica.
Israel ha desplegado drones, puestos de control en las carreteras y una misión del ejército en Jenin, la ciudad natal de Cisjordania de muchos de los prisioneros fugitivos. El Club de Prisioneros Palestinos dijo que dos hermanos de Mahmud Ardah, descritos en los medios locales como el autor intelectual de la fuga, han sido arrestados.
El ejército también ha detenido a otras cuatro personas: un compañero de la familia, el Dr. Nidal Ardah, junto con dos hermanos de un segundo fugitivo y el padre de Munadel Infeiat, otro fugitivo.
Los palestinos de todo el espectro político se han unido en torno a los fugitivos, quienes capturaron la imaginación del público con lo que se consideró una operación audaz que expuso las debilidades en el complejo carcelario fuertemente fortificado de Israel.
Se han producido manifestaciones a gran escala en apoyo de ellos en Cisjordania y Jerusalén, algunas de ellas violentas.
El jueves por la noche se produjeron enfrentamientos en la ciudad de Hebrón, donde decenas de palestinos arrojaron piedras a los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel. No hubo informes inmediatos de heridos. Al menos un palestino fue arrestado por presuntamente arrojar piedras a las tropas israelíes. Las tropas y la policía se estaban preparando el viernes por la mañana para la posibilidad de una reanudación de la violencia después de que Hamas pidiera un “día de ira” en apoyo de los prisioneros.
La gran popularidad de la que gozan los seis ha atado las manos de Ramallah, lo que dificulta la justificación de ayudar a atrapar a los héroes populares de los últimos días. “La Autoridad Palestina no cooperará con Israel en los prisioneros fugados a través del mecanismo de coordinación de seguridad“, dijo el jueves el ex ministro de asuntos de prisioneros de la Autoridad Palestina, Ashraf al-Ajami, a la Radio del Ejército.
Pero según el informe de al-Akhbar, la Autoridad Palestina estaba interesada en poner fin al asunto en medio de temores de que los continuos disturbios pudieran desestabilizar Cisjordania y Gaza, e impulsar a los rivales Hamas y la Jihad Islámica.
Antes de la fuga de la prisión, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, había tomado medidas para estrechar lazos con Israel, después de varios años en los que las partes tenían poco contacto significativo más allá de la cooperación en seguridad, que estuvo congelada durante varios meses antes de que el presidente estadounidense Joe Biden asumiera el cargo.
El ministro de Defensa, Benny Gantz, se reunió con Abbas a fines del mes pasado y dijo que estaba de acuerdo con una serie de gestos de buena voluntad. Señaló que a Israel le interesaba reforzar el control de la Autoridad Palestina en el poder.
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