Enlace Judío – Un hombre de unos 30 años fue encontrado muerto a tiros este martes en un automóvil en el desierto del Néguev, en el sur de Israel, el tercer aparente homicidio criminal en la comunidad árabe en 2 días y el número 89 desde el comienzo del año, de acuerdo con The Times of Israel.
El cuerpo del hombre fue encontrado en un vehículo cerca de Ramat Hovav, al sur de Be’er Sheba. La parte delantera del coche estaba destrozada y acribillada a balazos.
La policía está investigando y por el momento no hay sospechosos detenidos. El asesinato se produjo un día después de que otros 2 hombres árabes fueran asesinados en incidentes separados.
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El lunes, un muerto y 5 heridos fue lo que dejó un ataque a tiros ocurrido en una boda en la localidad árabe de Taibe, en el centro del país.
El martes, la policía arrestó a un residente de la ciudad de 22 años sospechoso del asesinato de Alaa Sarsour.
El padre del novio le dijo a Haaretz que el sospechoso era un amigo de su hijo que había sido invitado a la boda y había comido junto a otros invitados antes de sacar un arma y abrir fuego.
El asesinato se produjo solo unas horas después de que otro joven fuera asesinado a tiros en la ciudad árabe de Zarzir, en el norte del país. La policía sospecha que el tiroteo fue un ajuste de cuentas entre grupos criminales, según el sitio Ynet.
La semana pasada, 2 hombres árabes fueron asesinados a tiros en aparentes homicidios en el norte de Israel.
El martes también ocurrió la muerte de un voluntario de la Policía de Israel y y un agente quedó herido en un sitio de construcción en Nahariya, cuando fueron atropellados por un automóvil después de ir a verificar los permisos de los trabajadores.
Un sospechoso arrestado es un contratista y una figura muy conocida del fútbol en la comunidad árabe.
El número de árabes israelíes asesinados en 2021 está en camino de eclipsar el total del año pasado. En 2020, 96 árabes israelíes murieron en ataques violentos, con mucho el número anual más alto de años recientes.
Los árabes israelíes culpan a la policía, que, según dicen, no ha tomado medidas enérgicas contra las poderosas organizaciones criminales e ignora en gran medida la violencia, que incluye disputas familiares, guerras territoriales de grupos criminales y violencia contra las mujeres.
Según un informe de la Knéset de 2020, unas 400,000 armas ilegales están circulando en Israel, la gran mayoría en comunidades árabes.
En julio, el primer ministro Naftali Bennett dijo que la violencia y el crimen en las comunidades árabes israelíes eran una “calamidad nacional”, cuando se reunió con altos funcionarios del gobierno y la policía para formular un plan nacional para abordar el problema.
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