Enlace Judío.- La compañía farmacéutica multinacional israelí Teva Pharmaceuticals no ha sido declarada responsable en una demanda de California presentada contra ella y otros tres gigantes farmacéuticos, en la que los gobiernos de los condados de California, a saber, de Santa Clara, Los Ángeles y Orange, demandaron a los fabricantes de medicamentos por 50.000 millones de dólares.
La demanda se presentó originalmente en abril, cuando varios condados de California acusaron a los fabricantes de medicamentos de alimentar la crisis de opioides en Estados Unidos.
Un juez de California dijo el lunes que fallaría en contra de varios condados grandes que acusaron a cuatro farmacéuticas de alimentar una epidemia de opioides, diciendo que no habían logrado probar su caso de 50.000 millones de dólares en el juicio.
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El juez de la Corte Superior del Condado de Orange, Peter Wilson, emitió un fallo provisional en el que determinó que Johnson & Johnson, Teva Pharmaceutical Industries Ltd, Endo International PLC y la unidad Allergan de AbbVie Inc no son responsables de crear una molestia pública. El fallo marcó la primera victoria de juicio para cualquier compañía farmacéutica en las más de 3.300 demandas presentadas por gobiernos estatales y locales por la “crisis de opioides” que actualmente atrapa al público estadounidense, según publicación en The Jerusalem Post.
Teva fue notablemente la única empresa no estadounidense que se enfrentaba a cargos en la demanda.
Wilson agregó que incluso si el marketing de los fabricantes de medicamentos contuviera declaraciones falsas o engañosas sobre los riesgos y beneficios de los opioides, los populosos condados de Santa Clara, Los Ángeles y Orange y la ciudad de Oakland no podrían responsabilizarlos, diciendo que “cualquier consecuencia posterior que se deriven de las recetas médicamente apropiadas no pueden constituir una molestia pública procesable”, según una resolución gubernamental federal y estatal existente.
La demanda se presentó originalmente a mediados de abril de 2021, cuando los tres condados de California, junto con la ciudad de Oakland, acusaron a los fabricantes de medicamentos de alimentar la crisis de los opioides en los Estados Unidos, que ha provocado la asombrosa cantidad de casi 500,000 muertes en dos décadas a causa de sobredosis de opioides.
Los demandantes afirmaron que las empresas en cuestión habían promovido abiertamente los analgésicos opioides como una solución al dolor crónico, causando prescripción excesiva en todo el país y provocando la infame epidemia de opioides en Estados Unidos.
Se estimó que 10,1 millones de personas de 12 años o más abusaron de los opioides en el último año, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos del HHS de EE. UU. Aproximadamente 9,7 millones de personas abusaron de los analgésicos recetados, mientras que 745.000 personas consumieron heroína, muchas de las cuales habían dejado de usar analgésicos recetados a medida que empeoraban sus adicciones.
“No se oirá nada de un solo médico que haya sido engañado”, dijo Collie James, el abogado de Teva, al comienzo de la demanda.
Teva, fundada en 1935 en Jerusalén y actualmente con sede en Petah Tikvah, Israel, es una de las corporaciones más grandes del país, con ingresos anuales cercanos a los $ 17 mil millones según sus últimas divulgaciones financieras y sus acciones cotizan en la Bolsa de Valores de Tel Aviv.
Teva Pharmaceuticals fue el mayor fabricante de medicamentos genéricos del mundo hasta el año pasado, cuando fue superado por Pfizer. Teva sigue siendo la decimoctava empresa farmacéutica más grande del mundo en general.
A pesar del fallo, el juez Wilson dijo que estaba al tanto del precio que la mortal epidemia de opioides ha infligido a la sociedad y que las hospitalizaciones como resultado del abuso de drogas y las muertes por sobredosis relacionadas con opioides “demuestran claramente la enormidad del problema en curso”.
Johnson & Johnson, con sede en Estados Unidos, que se encontraba entre las cuatro empresas nombradas en la demanda, dijo que la decisión mostraba que sus “acciones relacionadas con la comercialización y promoción de sus importantes analgésicos recetados eran apropiadas y responsables, y no causaban ninguna molestia pública”, en un comunicado oficial.
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