Enlace Judío – Nuevo hallazgo de la Liga Antidifamación (ADL) apunta a un incumplimiento mucho mayor por parte de Facebook en la promoción de los Protocolos de los sabios de Sion en las publicaciones en árabe.

DAVID ANDREW WEINBERG

A raíz de una denuncia, Facebook ha sido criticado por no tomar las medidas adecuadas para hacer frente al discurso de odio en su plataforma. La ADL ha señalado en repetidas ocasiones que la compañía depende demasiado de la inteligencia artificial para gestionar el contenido de odio y que las empresas de medios sociales como Facebook necesitan intensificar las medidas a escala y por diseño, cambiando su enfoque básico a la amplificación de contenido, revisión manual y transparencia.

Aunque los titulares en Estados Unidos se han centrado en las publicaciones en inglés, los contenidos censurables son evidentes en todos los idiomas y, de hecho, están tanto o más extendidos en otros idiomas que en inglés. Un ejemplo especialmente escalofriante es la forma en que Facebook asume en su plataforma la promoción de los Protocolos de los sabios de Sion en las publicaciones en árabe.

Los Protocolos de los sabios de Sion es posiblemente la calumnia antisemita más icónica y mortal de la historia moderna y, aunque fue escrita en Europa y ha tenido un alcance global, su público más receptivo está en el Medio Oriente, tanto en lengua árabe como en persa.

Sin embargo, Facebook no ha tomado ni siquiera las medidas más elementales para limitar la difusión de este odioso tratado, como sería impedir que los usuarios exploten su plataforma para crear grandes grupos o páginas de Facebook específicamente destinados a promover los Protocolos entre el público de lengua árabe. En un examen superficial, la ADL encontró docenas de grandes grupos o páginas de Facebook en árabe dedicados expresamente a este propósito, con al menos 100 ‘Me gusta’ o seguidores, y de los cuales aproximadamente la mitad tenían más de mil seguidores o ‘Me gusta’.

No hay ningún motivo de peso para pensar que el desafío del evidente odio en línea en Facebook sea algo exclusivo del contenido en lengua árabe, o exclusivo del odio en línea dirigido contra los judíos. Una búsqueda en Facebook de temas de odio comunes sobre otras comunidades vulnerables y en otros idiomas también arroja cantidades de grupos o páginas de Facebook preocupantemente grandes con discursos de odio incluso en sus nombres, como es el caso de contenidos contra los bahaíes en persa, contenidos contra los armenios en turco y el amplio contenido antimusulmán en inglés, por mencionar solo algunos ejemplos.

¿Por qué los Protocolos y por qué en árabe?

Facebook afirma que se toma muy en serio la identificación y eliminación del discurso de odio porque este puede contribuir a la intimidación, la exclusión e, incluso, a la violencia. Asegura que el uso de herramientas de inteligencia artificial para encontrar y retirar proactivamente los contenidos de odio es tan eficaz que estas fueron responsables del 97,6% de los casos recientes de eliminación de contenidos que incitaban al odio por parte de Facebook, de manera que la plataforma solo dependió de los usuarios de Facebook o de la sociedad civil para señalar el 2,4% restante de los casos.

Facebook reconoce que la mayor parte de sus esfuerzos se llevan a cabo en inglés. Incluso al margen de los documentos filtrados recientemente que supuestamente muestran que los propios empleados de Facebook discuten las afirmaciones de Facebook, está claro que los sistemas automatizados de Facebook no identifican la mayoría de los contenidos de odio en la plataforma. Facebook pasaría por alto inmensas cantidades de contenido de odio incluso si su ejecución fuera perfecta. Por ello, una pregunta clave es ¿cómo maneja Facebook el discurso de odio en otros idiomas? En respuesta a una pregunta reciente de Arab News, un portavoz de Facebook declaró que “nuestra tecnología identifica de forma proactiva la incitación al odio en más de 40 idiomas en todo el mundo, incluido el árabe”. Sin embargo, la denunciante Frances Haugen afirmó ante el Congreso que Facebook tiene “documentación que muestra su inversión operativa en diferentes idiomas y demuestra un consistente patrón de subinversión en idiomas que no son el inglés”.

Y si Facebook realmente buscara en su plataforma mensajes que respalden los Protocolos en idiomas distintos del inglés, el árabe sería un primer lugar donde buscar. Incluso las Naciones Unidas —una institución con notorios puntos ciegos respecto al antisemitismo— es consciente de la popularidad de los Protocolos entre el público del Medio Oriente. De hecho, como lo señaló un informe de 2019 del Relator Especial de la ONU para la Libertad de Religión o Creencias, Ahmed Shaheed, las teorías conspirativas que alegan “que los judíos constituyen una ‘poderosa cábala mundial’ que manipula a los gobiernos, los medios de comunicación, los bancos, la industria del entretenimiento y otras instituciones con fines malévolos, son también expresiones de actitudes antisemitas”. Muchos de esos estereotipos negativos se promulgaron en los Protocolos de los sabios de Sion, una desacreditada falsificación publicada a principios del siglo XX y ampliamente difundida en el Medio Oriente, en la que se alegaba un plan secreto judío para la dominación del mundo”.

Además, los Protocolos deberían ser un caso evidente para una aplicación estricta de la ley por parte de Facebook, ya que la definición de la empresa de Discurso de Odio Nivel 1 prohibido incluye expresamente las generalizaciones deshumanizadoras sobre “personas judías que dirigen el mundo o controlan instituciones importantes, como las cadenas de medios de comunicación, la economía o el gobierno”. Los Protocolos, por supuesto, son el ejemplo más emblemático de esa odiosa calumnia antisemita. Además, la tesis principal del libro es tan intrínsecamente demonizadora que las ediciones impresas de los Protocolos suelen representar a los judíos como bestias monstruosas —serpientes, arañas, pulpos o demonios.

Entonces, si Facebook toma o no medidas efectivas para evitar que los Protocolos se difundan ampliamente en su plataforma en árabe debería ser una prueba muy fácil si, como afirma, se puede confiar en que Facebook enfrente enérgicamente el discurso de odio por sí mismo. Sin embargo, si Facebook no supera ni siquiera esa prueba tan básica de sus medidas proactivas para garantizar el cumplimiento de sus políticas, se plantean preocupaciones muy serias y ampliamente generalizables sobre la capacidad fundamental de Facebook para hacer frente al discurso de odio y garantizar que sus servicios no están extendiendo ese contenido perjudicial.

Los Protocolos son omnipresentes en Facebook

Con tan solo buscar variantes del título Protocolos de los sabios de Sion en árabe, la ADL encontró docenas de grandes grupos o páginas de Facebook que presentaban claras referencias a los Protocolos en sus títulos —39 para ser exactos. Todas esas 39 páginas o grupos tenían más de 100 “Me gusta” o seguidores, y 19 de ellas tenían más de 1.000. En total, estos grupos y páginas habían sido seguidos más de 70.000 veces y tenían más de 34.000 ‘Me gusta’.

El hecho de que se hayan creado tantos grupos y páginas de Facebook en árabe para promover la obra más emblemática de la historia moderna en materia de discurso de odio contra los judíos sugiere claramente que la plataforma no cumple ni siquiera con sus responsabilidades más básicas y sus políticas declaradas en lo que se refiere al horrible discurso de odio contra los judíos en todos los idiomas en los que está disponible Facebook.

Tan solo los nombres de estos grupos y páginas de Facebook deberían haber sido motivo suficiente para que la empresa los marcara automáticamente para revisión y suspensión; sin embargo, muchos de los grupos han estado activos durante varios años. Y, en ese tiempo, han aprovechado el alcance de Facebook para propagar un discurso de odio sobre los judíos que es grave, degradante y peligroso.

Por ejemplo, una página de Facebook se titula simplemente “Los protocolos de los sabios de Sion” en árabe y su dirección web es simplemente https://www.facebook.com/ProtocolsoftheEldersofZion/. Tiene más de 2.000 seguidores y 2.000 “Me gusta”, y ha estado en funcionamiento continuo desde 2013. Su sección “Acerca de” afirma en árabe que “los Protocolos de los sabios de Sion se encuentran entre los libros más famosos que exponen las prácticas masónicas en la dominación del mundo” y que “los judíos son los amos del mundo y sus corruptores”.

Un segundo ejemplo se refiere a un grupo de Facebook que también se titula simplemente “Los protocolos de los sabios de Sion” en árabe y tiene más de 4.000 ‘Me gusta’ y 4.000 seguidores. Se describe a sí mismo como “una página científica política contra los planes del enemigo”. Una de sus publicaciones sostiene que el COVID-19 es un complot judío para reducir la población mundial. Otra promueve textos del primer capítulo de los Protocolos y representa a los judíos como una sanguinaria bestia mitad cerdo de pie sobre un cráneo humano:

Un tercer ejemplo es el caso de una página de Facebook que ha funcionado desde 2011 y cuyo título en árabe es “Los protocolos de los sabios de Sion y sus aplicaciones”; ha recibido más de 2.000 seguidores y 2.000 ‘Me gusta’. Su sección “Acerca de” afirma que “Los Protocolos de los sabios de Sion se consideran uno de los documentos más peligrosos escritos por los judíos y contiene un complot para implementar la dominación del mundo” y que “los judíos deben esforzarse de todas las formas posibles para restaurar este poder de acuerdo con este maligno complot que ha estado operando durante décadas.” Una de sus cinco publicaciones más recientes insta a los lectores a analizar varias acusaciones espeluznantes de los Protocolos “si quieren saber por qué la humanidad odia a los judíos y los rehúye, los persigue y los caza”.

Y otro crudo ejemplo, una página de Facebook creada en 2012 y con más de 1.000 ‘Me gusta’ y 1.000 seguidores, se titula “El libro completo de los Protocolos de los Hijos de Sion” en árabe. Su imagen de perfil de fondo muestra una serpiente con estrellas judías rodeando el globo.

Discurso de odio en otros idiomas

Es preocupante encontrar tan fácilmente los Protocolos en árabe en Facebook, al igual que los temas de odio en otros idiomas y sobre otros grupos vulnerables. Y los tropos son lo suficientemente básicos para ser relativamente obvios; si los esfuerzos de supervisión proactiva de Facebook estuvieran realmente impidiendo los contenidos de odio en la plataforma, dichos temas de odio comunes no deberían ser tan fáciles de encontrar.

Por ejemplo, Facebook alberga varios grupos o páginas en turco que tienen títulos dedicados a negar el genocidio armenio y todos tienen miles de miembros, ‘Me gusta’ o seguidores. Por ejemplo, una de ellas se titula en turco “La mentira del genocidio armenio”, otra “El genocidio armenio es una mentira” y una tercera “El genocidio armenio es una mentira imperialista internacional”. Una de ellas está alojada en Facebook en la ofensiva dirección https://www.facebook.com/groups/armeniangenocidelie.

Los contenidos censurables también son relativamente fáciles de encontrar en Facebook si se hace una busqueda en persa del término despectivo que el régimen iraní utiliza para referirse a los bahaíes: “la secta desviada”. Por ejemplo, un grupo de Facebook con 1.000 miembros se llama en persa “El crimen de la desviada secta bahaí”, a pesar de que Facebook dice tener prohibido referirse a grupos protegidos como criminales. La imagen de portada de ese grupo representa a los bahaíes como monstruos horripilantes o adoradores de Satanás:

Foto de portada de un grupo de Facebook con más de 1.000 seguidores llamado en persa “El crimen de la desviada secta bahaí”.

Y tampoco es que Facebook esté haciendo un trabajo eficaz para eliminar el discurso de odio obvio en su idioma principal, el inglés. Por ejemplo, varios grupos de Facebook con miles de seguidores ostentan nombres que enfatizan variantes del tema islamófobo que alega injustamente que el Islam es una secta o no una religión real.

Una de estas comunidades de Facebook con miles de seguidores, llamada “El islam es una secta”, tiene una foto de perfil en la que se califica al islam de “secta de la muerte” y una sección “Acerca de” en la que se denuncian las “maldades” del islam. Su foto de portada declara ofensivamente que “No tengo ningún problema con el Islam, excepto por:” y procede a enumerar una serie de horribles calumnias antimusulmanas, entre ellas “pedofilia”, “terrorismo”, “analfabetismo”, “palizas a los niños”, “crueldad con los animales”, “violación” y “codicia”.

Otra comunidad de este tipo en Facebook, que cuenta con miles de seguidores, se titula “El islam no es una religión” y tiene una foto de perfil con una cita del político antimusulmán Geert Wilders en la que califica al islam de “ideología de una cultura retardada”. Una de las diez publicaciones más recientes de la página incluye comentarios de sus lectores que proclaman “no es posible coexistir con gente que quiere matarte” y “la única manera de lidiar con el Islam” superpuestos a una imagen de una pistola apuntando a la boca del líder supremo de Irán, aparentemente retratándolo como un representante de todos los musulmanes:

Una odiosa imagen subida como parte del comentario de un lector en un grupo de Facebook titulado “El islam no es una religión”.

Conclusiones

Es difícil saber qué es más preocupante: si el terrible odio que promueven grupos y páginas de Facebook como estos, o que Facebook afirme que retira de forma proactiva la incitación al odio, cuando grupos y páginas como estos llevan tantos años difundiendo sin consecuencias su flagrante discurso de odio y cuando deja prosperar en su plataforma durante meses o años violaciones tan claras de sus propias políticas. Cabe preguntarse si Facebook permite estos grupos intencionalmente o simplemente son incompetentes.

En cualquier caso, la conclusión es clara: Facebook tiene que hacer mucho más para hacer frente a tan horribles discursos de odio en su plataforma y no seguir intensificando contenidos tan peligrosos.


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