Enlace Judío – El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, apoya explícitamente la libertad de Israel para actuar contra Irán, ya sea que haya un regreso a un acuerdo nuclear o no, dijo este lunes el primer ministro Naftali Bennett, informó The Times of Israel.

Según Bennett, Biden hizo una declaración en ese sentido en su conversación telefónica el domingo por la noche.

La lectura estadounidense de la conversación señaló que Biden expresó su “apoyo inquebrantable a la seguridad y la libertad de acción de Israel”, pero no lo vinculó directamente con Irán.

“Dejé en claro, y me alegró que lo dejara explícitamente claro, que Israel mantendrá su libertad de acción en cada situación”, dijo Bennett a los periodistas israelíes durante una sesión informativa en su oficina de Jerusalén. “Es extremadamente importante. Mantendremos nuestra libertad de acción sin ninguna conexión con lo que será, con o sin acuerdo”.

El asesor de Seguridad Nacional, Eyal Hulata, expuso en la sesión informativa los puntos principales de la estimación del Consejo de Seguridad Nacional para 2022, que se presentó a Bennett el domingo.

Hulata dijo que espera que 2022 sea un año de cambios con respecto a la amenaza iraní.

“Ya sea que haya o no un regreso al acuerdo nuclear, 2022 será un año en el que nuestro entorno nos hará operar de manera diferente a como lo hacíamos hasta ahora, y tenemos que prepararnos”, dijo.

Está previsto que Hulata vuele a Washington, D. C., el lunes por la noche para reunirse con su homólogo estadounidense, Jake Sullivan. Llamó a la coordinación con Estados Unidos “profunda, importante y estratégica”.

Hulata dijo que existe una posibilidad real de que Irán regrese a un acuerdo nuclear y que Estados Unidos pierda sus herramientas para empujar a Irán a un acuerdo “más largo y más fuerte”.

“Debemos prepararnos para cada una de las posibilidades, ya sea que haya un regreso a un acuerdo o no”, dijo.

Las conversaciones para revitalizar el acuerdo nuclear de Irán de 2015 con las potencias mundiales se reanudarán el martes después de una interrupción de más de una semana para que los diplomáticos regresen a casa para consultas.

Israel ha cambiado drásticamente su enfoque hacia Irán en los últimos meses, dijo el lunes un funcionario israelí, iniciando una campaña a largo plazo para debilitar a Irán.

“Debilitándolo en primer lugar económicamente, utilizando una variedad de actividades: económicas, diplomáticas, asesinatos selectivos, abiertos, encubiertos, cibernéticos y otros”, dijo. “Nuestro objetivo es acosarlos en casa, para que estén ocupados consigo mismos”.

“La campaña continuará”, prometió. “No ocurrirá en uno o dos años”.

El funcionario dijo que durante la última década, Israel se centró en luchar contra los aliados de Irán en Gaza y el Líbano, mientras que los líderes en Teherán se sentaron cómodamente a mil kilómetros de distancia.

Agregó que Israel estaba invirtiendo fuertemente en esta campaña: “Heredamos una brecha enorme aquí, porque no había un Plan B interno. Asignamos cientos de millones de shekels para cerrar la brecha operativa y de inteligencia. Estamos cerrando la brecha rápidamente”.

Bennett, durante su sesión informativa, también se refirió a un posible deshielo en las relaciones con Turquía.

Dijo que el presidente Yitzhak Herzog está desempeñando un papel importante en el acercamiento diplomático a Ankara. “Desde mi punto de vista, el presidente está haciendo un trabajo sobresaliente, es un activo diplomático extraordinario para resolver problemas”.

Bennett dijo que los dos líderes están totalmente coordinados en sus actividades, incluido un posible viaje a Turquía de Herzog.

El domingo por la noche, Herzog habló con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Los dos líderes también discutieron la posibilidad de reunirse pronto,

“Vamos a avanzar con mucho cuidado con Turquía”, dijo el funcionario israelí. “Muy lentamente. No son grandes amigos de Irán, por decir lo menos, por lo que no debemos comprometernos con algún tipo de pureza que nos impida operar y crear alianzas”.

La estimación del Consejo de Seguridad Nacional trató ciertos desafíos domésticos, incluidos el cambio climático y los desastres naturales, como amenazas a la seguridad nacional.

Durante la sesión informativa, hubo un enfoque particular en los delitos violentos en las comunidades árabes como un problema de seguridad nacional.

“Debemos comprender el alcance del peligro de las familias criminales en Israel”, dijo Bennett. “Nos está comiendo por dentro. Las estafas de protección corroen los cimientos de la sociedad”.

“En la sociedad árabe, esto fue ignorado y debemos enfrentarlo”, continuó. “Es mucho peor de lo que pensábamos”.

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