Desde donde estés recibe estas palabras con mucho amor Víctor, ¡querido amigo mío!

Siempre fuiste un hombre incansable, lleno de amor a la vida y a tus semejantes, siempre con una sonrisa y una palabra de esperanza y aliento a pesar de cualquier problema que surgiera.

Un hombre que con su amistad, amor y calor siempre nos abrazabas.

Una hombre sabio, culto, inteligente, sensible, siempre irradiaste luz a todos los que estábamos a tu alrededor.

Un hombre luchador por sus ideales, un pionero de la paz.

Jamás te olvidaré, siempre permanecerás en mi corazón lleno de amor por ti. Me dejas un gran vacío…

Hoy deseo darte las gracias por todo lo que me brindaste en mi vida.

Para uno de tantos eventos que he realizado en los que tú siempre me acompañaste y me apoyaste, quiero brindar un Lejaim para ti.

Que D_ _s te bendiga, te abrace y te dé paz.

Maty Braverman