Enlace Judío- Como líder del ejército israelí durante cuatro años (2015-1019), Gadi Eizenkot debió encarar no pocos dilemas. Nacido en una familia marroquí y formado como adolescente en Eilat lejos de los bulliciosos núcleos urbanos, Gadi acertó en integrarse a las fuerzas militares de Israel.
Después de moldearlas y dirigirlas durante cuatro años hoy es una figura cortejada por todos los partidos políticos de Israel. Una de sus inclinaciones es pública: frenar cualquier expresión de apoyo electoral a Benjamín Netanyahu. No es claro sin embargo si formalmente habrá de incorporarse a uno de los partidos que toman parte en el quinto torneo electoral que tendrá lugar el próximo 1 de noviembre.
Sus inclinaciones oscilan en favor de Benny Gantz o de Yair Lapid. La decisión final se conocerá en las próximas semanas si la tensión militar en Gaza y en el sur del país afloja y devuelve al país a una relativa tranquilidad.
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Ambos partidos le ofrecen un alto lugar. Por sus inclinaciones personales y experiencia es probable que al cabo considerará dos opciones: integrarse a la fracción de Gantz o mantener una postura de lúcido observador del escenario israelí.
En cualquier caso sus opiniones merecen amplia consideración pública. De momento se ha manifestado en favor de una solución equilibrada de la cuestión palestina. Un planteamiento que seguramente ampliará ya sea como decisivo candidato de un partido, ya sea como observador de la inquieta escena israelí.
Le ayudan las experiencias que recogió hace ya una década como asesor militar de Barak y sus aciertos como líder militar. Gravitará sustancialmente en el trajín electoral.
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