Enlace Judío.- Una soldado asesinada a tiros en un puesto de control de Jerusalén Este por un palestino durante el fin de semana fue enterrada el lunes por la noche, al entrar en el tercer día de la búsqueda del sospechoso, publicó The Times of Israel.
La sargento Noa Lazar, de 18 años, fue enterrada en un cementerio en Kfar Yona, cerca de su ciudad natal de Bat Hefer, en el centro de Israel.
Cientos de familiares y amigos asistieron a la ceremonia nocturna, cerrada a la prensa.
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Con los abuelos de Lazar en el extranjero en el momento de su asesinato, su familia esperó para celebrar el funeral hasta el lunes por la noche, después del primer día de la festividad de Sucot.
Entre los que hablaron en el funeral estaba Hagai Sin Itzik, jefe del batallón Erez de la Policía Militar, donde sirvió Lazar.
“A pesar de los desafíos, no se dio por vencido, comprendió rápidamente la importancia del trabajo y lo llevó a cabo con seriedad, dedicación y profesionalismo”, dijo Itzik en declaraciones obtenidas por el sitio de noticias Ynet.
“Nos impresionó su rápida capacidad de aprendizaje y empezamos a confiar en ti. Logró frustrar los ataques terroristas y, por lo tanto, contribuyó significativamente a la seguridad del país y sus ciudadanos”, continuó su comandante.
“En poco tiempo te convertiste en una figura destacada, significativa y destacada en la unidad. Eras querida, rodeada de amigos, llena de alegría y con una risa contagiosa. Tu carácter especial influenció a todos”.
Amigos y conocidos de Lazar recordaron a la soldado caída tras despertarse con la noticia de su muerte la mañana del domingo.
“Era una niña maravillosa, brillante, sonriente, divertida, hermosa y muy amigable”, recordó Lihi Avizohar, quien conoció a Lazar de las actividades del grupo de jóvenes Scouts en Bat Hefer, cerca de la ciudad costera de Netanya.
Otro amigo escribió: “Mi ángel hermoso, no puedo creer que esté escribiendo esto. Te amo. Eres mi pareja más querida, y mi corazón está aplastado en mil pedazos”.
El jefe del Consejo Regional de Emek Hefer, Galit Shaul, comentó sobre la “mañana dolorosa y difícil para Emek Hefer” y ofreció su apoyo a la familia y amigos de Lazar.
Lazar recibió un disparo el sábado por la noche junto con un guardia civil cuando un hombre armado abrió fuego en un puesto de control cerca del campo de refugiados de Shuafat en Jerusalén Este. El guardia fue hospitalizado en estado grave. Lazar fue llevada de urgencia al hospital, pero murió a causa de sus heridas poco después.
El presunto tirador fue identificado por los medios de comunicación en idioma hebreo como Udai Tamimi, un residente del campo de refugiados de 22 años.
Las fuerzas de seguridad israelíes seguían buscando a Tamimi el martes por la mañana, con la participación de un gran número de policías, tropas y agentes del servicio de seguridad Shin Bet. Aparentemente, el sospechoso logró colarse en el campo de refugiados después del asesinato, dijo la policía.
Durante el ataque, Tamimi salió casualmente del lado del pasajero de un vehículo blanco detenido en el puesto de control, se acercó a un grupo de soldados y abrió fuego casi a quemarropa.
El video del incidente publicado el domingo muestra que dos soldados caen al suelo después del tiroteo y los demás se lanzan al suelo para cubrirse. Se ve al hombre armado continuar disparando a una persona en el suelo antes de huir, aparentemente después de que su arma se atascó.
Según un informe del sitio de noticias Ynet, una investigación inicial encontró que el tiroteo ocurrió justo cuando los soldados estaban cambiando de turno, lo que se considera un punto débil táctico en cualquier puesto de control y requiere mayor seguridad. Se espera que el incidente provoque el despido de algunos de los comandantes en el lugar, informó Ynet.
Cuatro personas sospechosas de ayudar en el ataque a tiros fueron arrestadas durante la noche del sábado al domingo y se les ordenó permanecer bajo custodia hasta al menos el 16 de octubre mientras continúa la investigación, según un comunicado de la policía.
Según informes de los medios hebreos, la madre, el padre y el hermano del sospechoso también han sido detenidos. El hermano se entregó para ser interrogado por las fuerzas israelíes, al igual que el conductor del vehículo del que salió Tamimi. El conductor y otros tres pasajeros del vehículo negaron conocer sus intenciones.
El acceso al campo de refugiados de Shuafat y otras áreas de Jerusalén Este fue severamente restringido en medio de la persecución y las fuerzas que ingresaron allí el domingo se enfrentaron a docenas de palestinos, que les arrojaron piedras y dispararon fuegos artificiales a las tropas, según la policía y el video de la escena.
En los últimos meses, palestinos armados han atacado puestos militares, tropas que operan a lo largo de la barrera de seguridad de Judea y Samaria, asentamientos israelíes y civiles en las carreteras.
En redadas de arresto en la zona el martes temprano, las fuerzas arrestaron a 10 palestinos buscados e incautaron varias armas de fuego, dijeron las FDI.
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