Enlace Judío – Benjamín Netanyahu prometió que su gobierno no impondrá la “ley talmúdica” en Israel y calificó la reunión del expresidente Donald Trump la semana pasada con el rapero Kanye West y el conocido antisemita Nick Fuentes como “un error”.

En una entrevista publicada este miércoles en el portal Common Sense, se le preguntó a Netanyahu sobre la inclusión de figuras de extrema derecha en su nuevo gobierno, en particular el líder de Otzma Yehudit, Itamar Ben Gvir.

“La política principal o la política primordial del gobierno está determinada por el Likud y, francamente, por mí. Creo que tengo una influencia más que modesta en eso”, dijo Netanyahu.

“Este Israel no va a ser gobernado por la ley talmúdica”, agregó. “No vamos a prohibir los foros LGBT. Como saben, mi opinión al respecto es marcadamente diferente, por decirlo suavemente. Vamos a seguir siendo un país de leyes”.

Otro de los aliados de Netanyahu, Bezalel Smotrich, líder de Hatzionut Hadatit, dijo anteriormente que quiere que Israel sea gobernado por la ley judía, mientras que otra figura de extrema derecha a la que Netanyahu puso a cargo de una nueva autoridad de “identidad judía” quiere expresamente prohibir las marchas LGBT.

Netanyahu también dijo que su gobierno no tratará de manera diferente a los judíos involucrados en el terrorismo, distanciándose aparentemente de Smotrich.

“Nadie obtiene un descanso por el terrorismo. Si eres judío y cometes un acto terrorista, serás castigado y deberías ser castigado exactamente como cualquier otra persona. A nadie le importa. El terrorismo se define y la criminalidad debe definirse por la naturaleza del acto, no por la naturaleza del perpetrador”, dijo.

Netanyahu aludió a las preocupaciones sobre la demanda de Smotrich de ser nombrado ministro de Defensa, cargo que insistió en que permanecería en su partido Likud.

“Esa es una línea roja: la defensa está en nuestras manos. La defensa no es simplemente lo que crees que es. No se trata simplemente de prevenir los misiles entrantes. También es decidir sobre políticas que podrían ser bastante incendiarias. Estoy tratando de evitar eso”, dijo.

El jefe del Likud describió sus principales prioridades políticas en la entrevista, durante la que la entrevistadora, la periodista judía estadounidense de línea conservadora Bari Weiss no preguntó sobre su juicio por presunta corrupción en curso.

“Lo primero es evitar que Irán nos aniquile”, dijo. “Lo segundo es expandir el círculo de paz más allá de nuestra imaginación. Arabia Saudita sería un gran logro, tener paz con ellos, porque efectivamente terminaría con el conflicto árabe-israelí. No con el conflicto palestino-israelí”.

“Número tres es continuar haciendo de Israel una luz para las naciones. Es la nación de innovación por excelencia en la tierra… Si quieres, te daré los otros siete elementos de mi lista. Pero terminemos con los tres”, agregó.

Aunque no lo incluyó entre sus objetivos principales, Netanyahu insinuó las reformas judiciales propuestas defendidas por sus socios que buscan frenar el contrapeso del Poder Judicial frente al Poder Legislativo y la posible cancelación de su juicio.

“Tiene que haber un equilibrio entre los tres poderes del Estado. Ese equilibrio se ha visto afectado de muchas maneras en Israel por el aumento del Poder Judicial sin control. Corregir no es destruir la democracia, es protegerla”, dijo.

Netanyahu criticó al gobierno anterior, afirmando sin pruebas que el partido islamista Ra’am quiere destruir a Israel y apoya el terrorismo a pesar de sus reiteradas denuncias de violencia terrorista.

“Fue un gobierno de desunión. De hecho, prohibieron el acceso al gobierno a la mayoría de los ciudadanos judíos de Israel”, afirmó. “Para alcanzar el poder, le dieron el poder a un partido que quiere ver el fin del Estado judío tal como lo conocemos, que apoya abiertamente a los terroristas”.

También se le preguntó en la entrevista sobre el aumento del antisemitismo en los EE. UU., incluida la reunión de Trump con West y Fuentes.

“Creo que la decisión de Trump de cenar con [ellos] es incorrecta y está fuera de lugar. Creo que es un error”, dijo. “Él no debería hacer eso”.

Trump ha sido ampliamente condenado por recibir a West y Fuentes en su centro vacacional de Mar-a-Lago, incluso por parte de muchos republicanos prominentes y figuras judías que son partidarios del expresidente.

Su cena con los dos siguió a una serie de declaraciones antisemitas recientes hechas por West, mientras que Fuentes tiene un historial de negación del Holocausto y racismo.

Aunque Trump luego trató de distanciarse de Fuentes, insistiendo en que no sabía que estaba cenando con un supremacista blanco, no condenó sus declaraciones ni las de Kanye.

Pero Netanyahu enfatizó que Trump “ha sido un tremendo partidario de Israel, y aprecio enormemente lo que hizo por Israel.

“Creo que se equivocó. Espero que no se repita”, agregó.

Netanyahu y Trump transmitieron una estrecha relación de trabajo mientras este último estuvo en el cargo, aunque los comentarios hechos por el exlíder estadounidense durante el año pasado, incluido decir “que se joda” en una entrevista, indicaron que los lazos entre ellos se estropearon.

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