Enlace Judío – El presidente israelí Yitzhak Herzog dijo este viernes que los israelíes preocupados por las políticas del nuevo gobierno que integra a políticos de extrema derecha o temerosos por el futuro del carácter del país deberían tener más fe en la solidez de su democracia, informó The Times of Israel.
“Nadie tiene el privilegio de actuar o hablar como si ‘el país se ha perdido’ o de buscar su pasaporte”, dijo Herzog en declaraciones en una ceremonia conmemorativa del exjefe de las FDI Amnon Lipkin-Shahak, quien murió en 2012.
“Ayer por la noche tuvimos la tradicional foto del gobierno entrante en la Residencia del Presidente”, continuó. “Sé que para muchos, este período es desafiante y no fácil. Pero la democracia israelí es duradera y estable.
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“Ayer hablé con los [miembros del] 37º gobierno de Israel. Les deseé éxito en su importante misión y enfaticé que es su deber actuar por el bien de todos los ciudadanos israelíes y en el espíritu de la Declaración de Independencia”.
“Pedí y exigí que mostraran la responsabilidad que se requiere en este momento”, agregó Herzog.
El ex primer ministro Ehud Barak expresó críticas hacia el nuevo gobierno en su propio discurso en la ceremonia conmemorativa. “Como alguien que conocía bien a Amnón, puedo suponer lo que diría sobre este gobierno: que juró legalmente pero claramente es ilegítimo”.
“Este gobierno está llevando a cabo un golpe de régimen en Israel frente a nuestros ojos, con su racismo, corrupción, neutralización del sistema de justicia, politización de la policía y socavamiento de la cadena de mando en las FDI”.
“Al rescatarse a sí mismos de los juicios de sus amigos con la ayuda de racistas mesiánicos que distorsionan el judaísmo, el sionismo y la humanidad, están colapsando la democracia”, advirtió en un mensaje característicamente contundente.
A pesar de la perspectiva pesimista, Barak insistió en que todavía había “un camino de regreso de la oscuridad”.
“No está claro cuánto durará esto y qué daño causará, pero Israel saldrá vivito y coleando del túnel”, dijo, y agregó que los ciudadanos saldrían a las calles para llevar a la caída del gobierno.
“Si Amnón estuviera vivo, habría marchado con ellos, tal vez a la cabeza, y si pudiera, nos habría llamado a todos a hacer lo mismo”, declaró Barak.
Los comentarios se produjeron un día después de que miles de israelíes protestaron contra el nuevo gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu, tanto frente a la Knéset, donde prestaron juramento sus miembros, como en las calles de Tel Aviv.
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