Enlace Judío – El líder de la oposición, Yair Lapid, fue duramente criticado este jueves por activistas contra el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu, argumentado que debería encabezar las protestas contra la reforma judicial en lugar de viajar por el fin de semana, informó The Times of Israel.
“En un momento en el que se desarrolla un golpe de Estado en Israel y todos los cimientos de la democracia están siendo acribillados por el destructivo gobierno de [Benjamín] Netanyahu, el líder de la oposición, Yair Lapid, elige volar a París para pasar unas vacaciones. En lugar de declarar el estado de emergencia para impedir las medidas antidemocráticas, Lapid legitima estas medidas antidemocráticas”, tuiteó el Movimiento Kumi Israel.
“A esta hora, no hay liderazgo para una gran comunidad en Israel”, afirmó el grupo.
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Lapid defendió su viaje en una publicación de Facebook. “El miércoles por la noche trabajé hasta horas avanzadas de la noche, como siempre. Viajé por el fin de semana con Lihi. De jueves a domingo por la mañana. No sé si lo merezco, pero seguro ella lo merece. Ha sido el año y medio más loco de nuestras vidas. Ella no me acompañó a ningún viaje oficial, no como canciller ni como primer ministro. No teníamos grandes planes. Ver una exposición, tener una cena romántica, caminar mucho. Pero resulta que mucha gente tiene muchas cosas que decir al respecto. Decidieron que si no estoy aquí dos días y medio, significa que no estoy comprometido con la lucha por la democracia israelí. Odio estar a la defensiva y odio quejarme, pero hay un límite”, escribió.
“Toda mi vida está dedicada a la lucha por la democracia israelí. No hay nada que sea más importante para mí. Perdí millones de shekels y agregué miles de canas, pero no me arrepiento ni por un momento. La lucha por la cordura del Estado de Israel es una tarea sagrada. Es un gran honor dirigir a las personas que decidieron no rendirse. No pienso echarme atrás, rendirme o ceder ni por un segundo. Sí pensé que después de que lideré la operación militar, el acuerdo con Líbano, los operativos diarios en Jenin y Samaria, una difícil campaña electoral, quiero tomarme dos días y medio para respirar, pensar un momento, caminar de la mano de mi amada por las calles de París y preguntarle también cómo está”.
“Pagué con mi dinero los pasajes de avión, pagamos por el pequeño departamento cerca de la Torre Eiffel, por las comidas y el obsequio tradicional para Yaeli. Sé que algunos piensan que disfruté. Tienen razón. Ambos necesitábamos este viaje como el aire que respiramos”.
“El domingo volveré para continuar la lucha con todas mis fuerzas hasta que derroquemos a este terrible gobierno. Solo hay una condición que debe cumplirse para que esto tenga éxito: Debemos dejar de hostigarnos unos a otros, dejar de hacernos pruebas de pureza y, en su lugar, luchar juntos contra el verdadero riesgo: un gobierno oscuro con un primer ministro débil que amenaza con destruir la vida en común en Israel”, concluyó Lapid.
Esta mañana, los diputados del partido de Lapid se unieron a la protesta contra la reforma judicial frente a la Corte Suprema de Justicia mientras los jueces escuchaban los recursos legales que exigen anular el nombramiento del líder del Shas, Arieh Deri, como ministro del Interior y de Salud.
La reforma judicial presentada el miércoles por el ministro de Justicia, Yariv Levin, busca limitar significativamente las facultades de la Corte Suprema de Justicia de Israel, dar al gobierno control sobre el comité de selección de jueces y limitar la autoridad de los asesores legales del gobierno.
Los críticos advierten que las medidas previstas son un ataque a la división de poderes y al sistema constitucional del país. Sus defensores sostienen que las sentencias judiciales que anulan las decisiones de la Knéset o del gobierno socavan la voluntad de los votantes.
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