Enlace Judío – El ministro de Vivienda y Construcción, Yitzhak Goldknopf, líder del partido ultraortodoxo Yahadut Hatorá condenó los trabajos ferroviarios que se realizan en Shabat y exigió su cese inmediato, informó Haaretz.

En una carta dirigida a la ministra de Transporte, Miri Reguev, Goldknopf explicó: “He sido informado de que se están realizando obras ferroviarias durante el Shabat en los Ferrocarriles de Israel que no son una cuestión de vida o muerte [‘pikuaj nefesh’]”, escribió en un mensaje dirigido también al primer ministro, al ministro de Economía, al viceministro de Transporte y a los líderes de los partidos de la coalición.

Goldknopf señaló que el trabajo en Shabat viola los acuerdos de coalición firmados entre el Likud y los partidos ultraortodoxos y subrayó: “No podremos soportar esta situación. Pido su intervención urgente en este asunto”.

Aunque Reguev no respondió públicamente de forma inmediata, fuentes del Ministerio de Transporte afirmaron que el mantenimiento del ferrocarril en Shabat continuará, ya que es fundamental para evitar interrupciones del servicio ferroviario durante la semana.

El trabajo en Shabat y, en particular, las obras de infraestructura han sido un tema espinoso para los partidos ultraortodoxos, y han provocado crisis de coalición en el pasado.

El entonces presidente de Yahadut Hatorá, Yaakov Litzman, renunció a la Knéset en 2017 debido a su desacuerdo con el mantenimiento del ferrocarril en Shabat.

Los acuerdos de coalición entre Yahadut Hatorá y el Likud firmados el mes pasado establecen que “un representante del Gran Rabinato asistirá regularmente a las reuniones del comité para la concesión de permisos de trabajo en Shabat, y todos los proyectos del gobierno nacional, en relación con la observancia del Shabat y la halajá (ley judía)”.

La cláusula otorga a Yahadut Hatorá poder de veto sobre todas las obras de infraestructura que se realicen en Israel durante el Shabat.

Merav Mijaeli, anterior ministra de Transporte y líder del partido Avodá, dijo en respuesta a la carta de Goldknopf que “el costo de detener las obras en el ferrocarril en Shabat es un daño tremendo para quienes viajan en tren y en transporte público. Como ministra de Transporte, tomé la decisión de aumentar el ritmo de las obras en Shabat. Terminamos una gran parte del proyecto de electrificación del ferrocarril antes de lo previsto, y los trenes en dirección norte están volviendo. Pido a Reguev que no ceda a las exigencias delirantes de Goldknopf“.

Por su parte, el presidente del partido Israel Beitenu, Avigdor Lieberman, exministro de Finanzas, dijo: “De nuevo los operadores políticos jaredíes están diciendo al público lo que está bien y lo que está mal. Detener las obras ferroviarias en Shabat es una locura y tendrá un impacto directo en la economía israelí y en las muchas familias del Estado de Israel que utilizan el transporte público. Alguien en el gobierno tiene que recuperar la sobriedad y detener esta locura”.

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