Enlace Judío – La reforma judicial del gobierno de Benjamín Netanyahu es peligrosa y debe corregirse, dijo este lunes el ex primer ministro israelí Naftalí Bennett, al opinar por primera vez sobre el tema, informó The Jerusalem Post.
Bennett señaló que durante mucho tiempo ha creído que el sistema judicial de Israel ha asumido una autoridad excesiva y ha bloqueado cualquier intento de cambiarlo, y admitió que se necesitan algunos cambios.
Sin embargo, la propuesta actual es peligrosa, dijo.
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“Dañará los cimientos del Estado de Israel, su economía y sus ciudadanos y puede terminar rompiendo los lazos que nos unen a todos”, señaló Bennett.
Instó a ambas partes a sentarse juntas y discutir estos cambios para llegar a un acuerdo sobre cómo hacer cambios en el Poder Judicial.
“Para ser honesto, no es muy complicado”, dijo Bennett, “si ambas partes se unen con un poco de buena voluntad”.
Los funcionarios del Likud dijeron en respuesta: “Todo lo que estamos haciendo es implementar el legado de Bennett“.
Bennett se desempeñó como primer ministro entre junio de 2021 y junio de 2022. No participó en las elecciones recientes y ha tenido apariciones limitadas en los medios desde que dejó la oficina del primer ministro.
La reforma judicial busca limitar las facultades de la Corte Suprema de Justicia para derogar leyes y permitiría que la Knéset vuelva a promulgar legislación que el tribunal ha anulado.
También le daría al gobierno control sobre los nombramientos de jueces y permitiría a los ministros gubernamentales nombrar a sus propios asesores legales.
Los defensores dicen que los cambios son necesarios para frenar un Poder Judicial que socava la voluntad del pueblo representada en la Knéset, mientras que los críticos argumentan que eliminaría un control esencial sobre el Poder Legislativo y Ejecutivo, eliminando elementos democráticos del sistema de gobierno.
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