Enlace Judío – Se presentarán cargos contra 2 adolescentes sospechosos de destrozar docenas de tumbas en un histórico cementerio cristiano en Jerusalén a principios de este mes, informó The Times of Israel.
Jewish extremists vandalized 30 Christian graves at an old cemetery in Jerusalem.
I wish them to rot in prison. That's where they belong.
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Israel is a safe haven for Christians and other minorities – and I will do everything I can to ensure that. True Israelis love Christians. pic.twitter.com/vpx5TQPwel
— Hananya Naftali (@HananyaNaftali) January 5, 2023
Una investigación encontró que 28 lápidas fueron destrozadas en el cementerio protestante Monte Sión.
Los dos sospechosos, de 18 y 14 años, son de la región central del país, dijo la policía, sin dar más detalles sobre sus identidades.
Las imágenes de la cámara de seguridad del ataque mostraron a dos hombres jóvenes que llevaban Kipá y Tzitzit, los flecos rituales anudados que usan los judíos observantes, derribando cruces, rompiendo lápidas y arrojando escombros sobre las tumbas.
Durante el interrogatorio, la policía descubrió que el “vandalismo deliberado” se realizó por motivos racistas, según el comunicado.
Los sospechosos fueron arrestados días después de que se denunciara el vandalismo, y su prisión preventiva se prolongó hasta que finalmente fueron puestos en libertad bajo arresto domiciliario.
Las tumbas de figuras cristianas en el cementerio fueron encontradas derribadas y arrancadas de sus cimientos, inquietando a la minoría cristiana de la ciudad y provocando condenas a nivel mundial.
El cementerio tiene más de 170 años y alberga a destacados miembros de las fuerzas armadas y del clero de Jerusalén.
La Iglesia Anglicana en Jerusalén denunció la profanación en ese momento como el último crimen de odio contra la comunidad cristiana en Jerusalén en medio del conflicto israelí–palestino.
Entre las tumbas destruidas había una que contenía un busto del siglo XIX de Samuel Gobat, el segundo obispo protestante en Jerusalén que murió en 1879, dijo la diócesis episcopal.
Las tumbas de tres oficiales de policía, ciudadanos británicos que servían en la fuerza policial del Mandato Británico de Palestina, también fueron destrozadas.
La diócesis advirtió que la profanación del cementerio debe verse como una advertencia siniestra sobre el “odio contra los cristianos”.
“Muchas cruces de piedra fueron el objetivo de los vándalos, lo que indica claramente que estos actos criminales fueron motivados por la intolerancia religiosa”, dijo.
El vandalismo provocó una amplia condena internacional.
El cementerio protestante en el venerado Monte Sión, a las afueras de los muros de la Ciudad Vieja de Jerusalén, se estableció en 1848 y fue parte del territorio que Israel capturó en la Guerra de los Seis Días de 1967.
Extremistas judíos han vandalizado la propiedad de la iglesia en el Monte Sión en los últimos años.
En diciembre de 2021, los líderes cristianos en Tierra Santa advirtieron que sus comunidades estaban bajo la amenaza de ser expulsadas de la región por grupos radicales de judíos israelíes extremistas y pidieron un diálogo para preservar su presencia.
Los patriarcas y los líderes de las iglesias en Jerusalén emitieron una declaración conjunta advirtiendo del peligro que representan los grupos radicales que, según dijeron, tenían como objetivo “disminuir la presencia cristiana”.
Activistas judíos extremistas han llevado a cabo durante años vandalismo contra sitios cristianos en Jerusalén y otras áreas de Israel, incluidos grafitis de odio e incendios provocados. Los extremistas también atacan a los palestinos.
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