Enlace Judío / Rab Yaakov Menken – ¿Soy yo o el mundo parece volverse más volátil cada día? Antes decíamos que el año pasado no podíamos imaginar dónde estaríamos hoy. Ahora decimos lo mismo de la semana pasada. El célebre rabino Berel Wein, a quien tuve el privilegio de tener como profesor en el instituto, solía decirnos: “De lo único que podemos estar seguros es de que mañana no será como hoy”. Esto es innegablemente cierto para el pueblo de Ucrania, pero a medida que la guerra se intensifica, y las amenazas aumentan, la incertidumbre se siente en la puerta de todos.

La incertidumbre puede ser una sensación incómoda, incluso aterradora, y nuestro reflejo es hacer todo lo posible por poner las cosas en su sitio y devolver la vida a la normalidad. A estas alturas, sin embargo, nos hemos enfrentado a años de incertidumbre, y muchos se sienten tan impotentes como siempre. “No normal” es la nueva normalidad. Entonces, ¿cómo lidiamos con nuestro miedo al futuro desconocido?

Lo que podemos hacer es tener esperanza. Ahora bien, eso se utiliza a menudo como una expresión pasiva, incluso impotente, “esperar” algo sin nuestro propio esfuerzo. Sin embargo, la verdad es que es nuestra mayor fuerza.

La fiesta judía de Purim es la semana que viene. Nuestra nación estaba amenazada de aniquilación total a manos de un líder peligroso y narcisista [¿te suena?]. Mordejai y Ester movilizaron a los judíos en oración, y nos salvamos en un milagroso giro de los acontecimientos. Maimónides escribe que Purim se estableció para impartir a las generaciones futuras la lección definitiva de la historia de Purim: D-os siempre está a nuestro lado cuando Le invocamos. En el estribillo de “Shoshanas Yaakov”, el himno que tradicionalmente se recita después de cada lectura del Libro de Ester, cantamos “Para dar a conocer que todos los que tienen esperanza en Ti nunca serán decepcionados ni avergonzados; todos los que se refugian en Ti”. Esta es la fiesta de la esperanza, y de la cercanía de D-os a todos los que confían en Él.

Con esta esperanza, podemos afrontar nuestros sentimientos de preocupación en circunstancias inciertas. Purim ofrece el camino para que las cosas vuelvan a la normalidad. No la “nueva normalidad”, sino la normalidad que siempre ha existido a lo largo de nuestra historia y que sigue existiendo hoy. Acontecimientos como los que se desarrollan ante nosotros, y todos los sucesos de nuestra vida personal que nos descontrolan, nos hacen buscar la esperanza, y ésa es nuestra mayor fuerza. (Basado en una conferencia de Rav Avrohom Schorr).

Fuente: Project Genesis