El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, pidió el jueves la destitución de la Fiscal General Gali Baharav-Miara, alegando que ha estado “sirviendo como la líder de la oposición de facto”, informó The Times of Israel.
En una carta a los jefes de otros partidos del gobierno instándolos a respaldar la medida, Ben Gvir afirmó que el enfoque de Baharav-Miara ha sido “rechazar automáticamente cualquier decisión o proyecto de ley respaldado por el gobierno o aquellos relacionados con él”.
Si bien políticos del gobierno han criticado regularmente a Baharav-Miara e incluso han insinuado el deseo de destituirla como fiscal general, Ben Gvir se convirtió en el primero en hacer tal llamado abiertamente.
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“Soy consciente de la dificultad legal de despedirla, pero el daño que está causando la Fiscal General cada día que permanece en su cargo es inconmensurablemente mayor”, acusó Ben Gvir, quien encabeza el partido Otzmá Yehudit.
El ministro de Seguridad Nacional afirmó que Baharav-Miara fue nombrada por el gobierno de unidad anterior “en circunstancias cuestionables”, pero que, a diferencia de su conducta durante los últimos dos meses y medio, respaldó a dicho gobierno, dando el sí al acuerdo marítimo con el Líbano y al nombramiento de Herzi Halevi como jefe de las FDI.
No obstante, Ben Gvir dijo que había tratado de darle a Baharav–Miara la oportunidad de demostrar su valía durante el mandato del nuevo gobierno.
“Pero día a día, su comportamiento de oposición solo ha aumentado hasta el punto en que actualmente funciona como líder de la oposición de facto”, dijo.
Destacó la oposición de la Fiscal General a la legislación que le otorga una mayor autoridad a Ben Gvir sobre la policía, su esfuerzo por imponer un bloqueo en toda Jerusalén Este en respuesta a una ola de terrorismo, y las iniciativas de pena de muerte a terroristas e inmunidad paras la fuerzas de seguridad, medidas que, según advierten los críticos, conducirán a violaciones masivas de los derechos humanos.
Ben Gvir se opuso especialmente a que Baharav–Miara congelara su decisión de destituir al comandante de policía del distrito de Tel Aviv, Amijai Eshed, por el supuesto trato indulgente de este último a los manifestantes de las protestas contra la reforma judicial.
“La conducta de la Fiscal General perjudica… la capacidad de los ministros para implementar las políticas para las que fueron elegidos”, escribió.
Ben Gvir especuló que Baharav–Miara eventualmente respaldará cualquier acción que contravenga la reforma judicial.
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