La aspirante republicana a la Casa Blanca, Nikki Haley, y el senador de Florida, Marco Rubio, criticaron el miércoles al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, por su reprimenda al primer ministro Benjamin Netanyahu y la polémica reforma judicial de su gobierno, informó The Times of Israel.
La candidata republicana a la Casa Blanca dice que los comentarios de Biden son “escandalosos”, mientras que el senador de Florida sugiere que el presidente de EE. UU. es responsable si Israel fuera atacado por Hezbolá, Hamás o Irán.
“Es indignante que Joe Biden sermonee a Israel sobre un asunto que es completamente de su interés nacional”, tuiteó Haley. “Nunca quisiéramos que el gobierno israelí presionara a Estados Unidos en temas relacionados con nuestra Corte Suprema, y no lo harían. Deberíamos dejar que los israelíes decidan esto por sí mismos”.
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Haley, ex gobernadora de Carolina del Sur y embajadora de las Naciones Unidas durante la administración de Donald Trump, ha promocionado durante mucho tiempo su buena fe a favor de Israel como parte de su campaña para obtener el primer lugar en la boleta del Partido Republicano para las elecciones de 2024. Sin embargo, se enfrenta a la competencia, entre otros, de su exjefe y gobernador de Florida, Ron DeSantis.
Se da por hecho que Biden se postulará para la reelección.
Mientras tanto, el senador de Florida Marco Rubio, quien previamente expresó su malestar por la situación de seguridad desencadenada por el plan del gobierno israelí para la reforma judicial, sugirió que los comentarios de Biden constituían una amenaza para Israel.
“Si durante estos días ya peligrosos Israel es atacado por Hezbolá, Hamás o Irán será porque Joe Biden decidió involucrarse en la política israelí”, tuiteó Rubio.
El senador de Carolina del Sur, Lindsey Graham, quien también mostró malestar con el plan, escribió como parte de una serie de tuits sobre una llamada que tuvo con el ministro de Relaciones Exteriores, Eli Cohen, que “Israel y Estados Unidos tienen un vínculo inquebrantable”.
El martes, antes de abordar el Air Force One, preguntaron a Biden sobre el estado de la democracia israelí y la revisión judicial planeada por el primer ministro.
El presidente espera que Netanyahu se aleje de su actual legislación de revisión judicial y expresó preocupación por la democracia israelí. “Esperemos que el primer ministro actúe… para llegar a un compromiso genuino, pero está por verse”.
Netanyahu comentó poco después que aprecia la amistad y el compromiso de larga data de Biden con Israel y enfatizó que la alianza entre Estados Unidos e Israel es “inquebrantable” y puede superar los desacuerdos. Su gobierno está comprometido a corregir lo que, en su opinión, es un desequilibrio de poder entre las tres ramas del gobierno de Israel, y está tratando de hacerlo con el mayor consenso posible.
Aun así, Netanyahu dijo que “Israel es un país soberano que toma sus decisiones por voluntad de su pueblo y no en base a presiones del exterior, ni siquiera de los mejores amigos”.
El miércoles, la Casa Blanca elogió los comentarios de Netanyahu en lo que parecía representar un intento de la administración Biden de bajar la temperatura de las tensiones entre Estados Unidos e Israel.
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