(JTA) — El periodista que fue arrestado en Rusia el mes pasado y la comisionada para el antisemitismo del gobierno de Joe Biden se encuentran entre los 10 judíos de las “100 personas más influyentes de 2023” de la revista Time.
La lista anual de la revista, publicada el jueves, incluye políticos, titanes empresariales, artistas e innovadores de todo el mundo, desde el presidente Joe Biden hasta una sensación de YouTube con 145 millones de suscriptores.
Cada entrada va acompañada de un breve ensayo de otra figura destacada. Aquí están los judíos que fueron seleccionados.
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Sam Altman es el empresario tecnológico, director ejecutivo y cofundador del laboratorio de inteligencia artificial OpenAI. En 2016, el empresario Peter Thiel le dijo a The New Yorker que Altman es “culturalmente muy judío: un optimista pero un sobreviviente, con la sensación de que las cosas siempre pueden salir muy mal y que no hay un solo lugar en el mundo donde estés profundamente en casa.”
Judy Blume es la autora de libros para niños cuyos libros tratan con franqueza sobre la pubertad y otros desafíos del crecimiento. Una adaptación cinematográfica de su novela de 1970 Are You There God? It’s Me, Margaret, uno de los primeros tratamientos principales de familias interreligiosas, se estrenará en los cines este mes.
Doja Cat es una rapera y artista de performance que irrumpió en escena en 2020, cuando ganó el premio a la mejor artista nueva de MTV. Hija de una madre judía ashkenazí y un padre sudafricano negro, es conocida por mezclar géneros.
Nathan Fielder es un comediante y artista de performance cuya serie de 2022 que desafía el género The Rehearsal abordó el antisemitismo, la negación del Holocausto y la crianza de los hijos entre religiones. También contó con un tutor de hebreo de Portland, Oregón.
Neil Gaiman es un escritor de ciencia ficción cuya serie de cómics The Sandman se convirtió recientemente en una serie de Netflix. Criado por una familia judía que incursionó en la cienciología, también fue uno de los primeros críticos del distrito escolar de Tennessee que prohibió las memorias del Holocausto Maus el año pasado.
Evan Gershkovich es un reportero de The Wall Street Journal que fue detenido en Rusia en marzo por cargos de espionaje que el Departamento de Estado calificó como parte de la “guerra en curso contra la verdad” de Rusia. Hijo estadounidense de refugiados judíos de la Unión Soviética, Gershkovich, fue objeto de una campaña de concientización impulsada durante las celebraciones de Pésaj de este mes.
Bob Iger volvió a ser el CEO de Disney el año pasado. “Su regreso como CEO en 2022 marcó el comienzo de una nueva era de transformación y excelencia creativa” para la compañía de entretenimiento, escribió en Time la directora ejecutiva de General Motors y miembro de la junta de Disney, Mary Barra. Recibió el Premio Humanitario 2019 del Centro Simon Wiesenthal, advirtiendo que “a Hitler le habrían encantado las redes sociales”.
Deborah Lipstadt fue confirmada por el Senado de los Estados Unidos en marzo de 2022 como Comisionada Especial del Departamento de Estado para Monitorear y Combatir el Antisemitismo. Una reconocida académica especializada en la historia del antisemitismo y la negación del Holocausto, agradeció el reconocimiento de Time tuiteando: “Recibir este premio avanza en mi lucha continua para erradicar el antisemitismo y todas las formas de odio”.
Natasha Lyonne es la escritora, directora y actriz cuya popular serie en Netflix, Russian doll, usó convenciones de ciencia ficción para explorar la identidad, el trauma y los efectos intergeneracionales del Holocausto. En su ensayo de Time, el actor y director Taika Waititi, quien también es judío, llamó a Lyonne “la persona más genial de la sala”.
Janet Yellen es la primera mujer en ocupar el cargo de secretaria del Tesoro de los EE. UU. Nacida de padres inmigrantes judíos polacos, ha aparecido en teorías de conspiración antisemitas sobre el control “globalista” de las instituciones financieras.
Un puñado de otras personas en la lista tienen antecedentes judíos. La actriz y empresaria Drew Barrymore, reconocida por el comediante Jimmy Fallon por ser “un verdadero modelo a seguir”, está casada con un hombre judío, cría a un niño judío y dijo que ha “abrazado el judaísmo”, aunque no ha anunciado una conversión.
Lea Michele, quien el año pasado asumió el papel principal en Funny Girl en Broadway, tiene un padre judío pero no se identifica como judío. Y la esquiadora Mikaela Shifrin tiene un abuelo judío pero, según la Asociación de Esquí y Snowboard de EE. UU., “no está conectada con la comunidad judía”.
