Gerry Gottlieb se enteró a sus 33 años de edad que era adoptado; él nunca entendió porque sus padres se lo ocultaron. Sin embargo, este momento que pudo haber sido sumamente difícil en su vida no lo fue, pues representó mucho más dolor para él superar el rechazo social que sentía dentro de la comunidad.

 

Este tema, que casi nunca suele ser tratado, existe en nuestra comunidad: hombres y mujeres que por diferentes razones han sido adoptados y que, de alguna manera, lo han resentido a nivel social. ¿Hay realmente algún tipo de discriminación hacia las personas adoptadas entre nosotros?

La pregunta podría generar mucho debate, cada quien podría hablar desde su experiencia con familiares, amigos y conocidos.

Así que esta es únicamente la historia de Gerry Gottlieb, que no tocó las puertas de Enlace Judío para hablar de su vida, sino para hacer un llamado de conciencia para que no se permita dentro de nuestra comunidad ningún tipo de discriminación, pues cómo Gerry asegura con lágrimas en los ojos, es algo que duele en lo más profundo del corazón.

 

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