Por quinto año consecutivo, esta semana el Observatorio Web presentó su Informe anual de Antisemitismo en Internet. El mismo analiza, con la ayuda de programas que trabajan con inteligencia artificial, el nivel de antisemitismo en más de 7 millones y medio de contenidos en redes sociales en español, entre ellos tuits, comentarios en Facebook, videos de YouTube, resultados de búsquedas en Google y comentarios en medios digitales.

“El antisemitismo en América Latina tiene sus particularidades, es diferente del de Europa y otras partes del mundo, y por eso es importante conocer sus formas específicas, para desarrollar abordajes acordes y evitar importar conflictos de otras latitudes”, explica Claudio Epelman, director ejecutivo del Congreso Judío Latinoamericano, sobre la importancia del informe. ¿Y cómo se comportó entonces el antisemitismo a nivel regional? En la respuesta a esta pregunta radica una de las primeras conclusiones que se desprenden del reporte y gran parte de su valor. En palabras de Epelman, “el nivel de antisemitismo se mantiene parejo en todos los países analizados en el reporte, descontando pequeñas variaciones. Esto nos permite abordar el fenómeno a nivel regional, promoviendo el trabajo trasnacional en el desarrollo de estrategias para erradicar el antisemitismo y los discursos de odio”.

En cuanto a los resultados por plataforma, cabe destacar que en el buscador de Google el resultado es el más favorable de los últimos ocho años, registrándose un aumento del contenido positivo relativo a los judíos acompañado por un leve descenso del contenido negativo.

En contraste, YouTube registró el primer aumento en la cantidad de contenido antisemita en cinco años, interrumpiendo una marcada tendencia a la baja de períodos anteriores. Aunque el incremento no representa un salto considerable (2,71%), en el marco de las fuertes políticas de moderación de contenido de la plataforma cualquier aumento es significativo, pues puede evidenciar que los usuarios encuentran formas de “saltear” ese control. Quizás por eso no llame la atención que uno de los principales términos asociados al material antisemita fue “sionismo”.

En el caso de Twitter uno de cada diez tuits vinculados a temáticas judaicas es antisemita, y casi un 50% expresa una posición crítica hacia Israel o el mundo judío. Su impacto es bajo medido según la cantidad de impresiones, o sea, la cantidad de veces que otros usuarios vieron esos tuits. A diferencia del 2021, donde una parte importante de antisemitismo se concentró en el mes de mayo, durante 2022 se observó que este fue homogéneo durante el año. Asimismo, tampoco se registraron variaciones relevantes según los países.

Es fundamental contextualizar los resultados, y entender que la actividad en redes sociales está fuertemente ligada a la coyuntura. Diversos acontecimientos de la agenda internacional motivaron “picos” de contenido en Twitter, especialmente aquellos vinculados al conflicto palestino – israelí.

Algo similar ocurrió en Facebook, orientado a la coyuntural local: casi un tercio de los comentarios negativos registrados en la plataforma se hicieron en quince días de septiembre. Vale aquí recordar el incidente que tuvo lugar esa misma quincena, cuando el presidente de Chile Gabriel Boric no recibió las cartas credenciales del nuevo embajador israelí en Santiago.

Finalmente se analizaron comentarios en foros de portales y medios digitales en siete países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Panamá y Uruguay. Allí las métricas se mantuvieron similares a años anteriores, con un tercio de los comentarios positivos, un tercio negativos y antisemitas y el tercio restante compuesto principalmente por expresiones contra el gobierno de turno. Es importante aclarar que, en el análisis interanual, el antisemitismo se mantiene seis puntos por debajo del promedio de los últimos ocho años.

El estudio se vale de un algoritmo especial para detectar posteos y comentarios relevantes en diversas plataformas, y valorarlos de acuerdo a su contenido. Y aunque aquí la inteligencia artificial se utiliza con fines analíticos, los recientes pasos agigantados en la materia no han pasado desapercibidos. “Hoy miramos con atención cómo el desarrollo de este tipo de tecnología puede afectar la vida en democracia, particularmente en lo que respecta a la proliferación de discursos de odio en redes sociales, puntualmente a través de los famosos “bots”, cuentas que generan contenido automáticamente con inteligencia artificial”, concluyó al respecto Ariel Seidler, director del Observatorio Web.

Acerca del Observatorio Web

El Observatorio Web es una iniciativa conjunta del Congreso Judío Latinoamericano (CJL), la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) y la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) que desde el año 2010 trabaja contra la discriminación en Internet y por un uso responsable de las tecnologías. Educa sobre el uso responsable de las tecnologías y desarrolla estrategias efectivas para combatir la discriminación online. Trabaja desde un abordaje multidisciplinario, junto a gobiernos, empresas ligadas a Internet y otras ONG’s monitoreando la web. Elabora el Informe anual de antisemitismo en Internet, y sobre discriminación online a distintos colectivos.

Antisemitismo en YouTube

Antisemitismo
En el buscador de Google, el resultado fue el más favorable en los últimos ocho años
Antisemitismo
1 de cada 10 tuits vinculados a temáticas judaicas es antisemita, y casi un 80% expresa una posición crítica hacia Israel o el mundo judío

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