Enlace Judío – Rosh Hashaná se celebra este fin de semana. Es una de las festividades más importantes dentro del calendario judío. Dentro de todo lo que puede decirse de ella los siguientes son tres elementos que la distinguen.

Año Nuevo y cena festiva

Uno de los eventos más esperados y reconocidos de Rosh Hashaná es la cena festiva que se lleva a cabo con jalá (pan especial) redonda y manzanas con miel. La palabra Rosh Hashana quiere decir “cabeza de año”, se refiere al día primero del año. Es en esa cena que reconocemos el carácter festivo de la fecha y que la recordamos como un Año Nuevo. Se hace con familiares y amigos, y a través de una tradición que tiene cientos de años tomamos alimentos simbólicos para decirnos bendiciones. Por ejemplo, comemos granada y pedimos que nuestros actos buenos (mitzvot) sean tan abundantes como los granos de la misma, o comemos un pedazo de la cabeza de un carnero o de un pez y deseamos “ser cabeza y no cola”. Son tradiciones que nos visten de un sentido y nos ayudan a alegrarnos incluso dentro del carácter un tanto serio de la festividad.

Juicio

Al igual que el Año Nuevo secular Rosh Hashaná también tiene un carácter de reflexión y autoevaluación que lo distingue, con la diferencia de que en este caso el día está enmarcado por los numerosos significados que el calendario judío y la tradición le dotan. Se trata de llevar el pensamiento a un terreno espiritual, no sólo de mejora personal. Está incluido dentro de los “Días temibles” que preceden a Yom Kipur, es el inicio de buscar el perdón divino por nuestras faltas. Y la reflexión debe llevarnos hacia ese lugar. Se considera que éste fue el día en que D-os creó el mundo y como tal juzga el destino de Su creación y cada una de Sus criaturas. El hombre con especial atención.

Yom Terua. El sonido del shofar

El nombre que este día recibe en la Torá es Yom Terua y se refiere a las trompetas que sonaban en tiempos bíblicos antes de cada guerra. El shofar que tocamos hoy está inspirado en esas trompetas sin embargo tiene ciertas particularidades que nos recuerdan otras dimensiones del día. Por ejemplo, se hace con el cuerno de un carnero para recordar el sacrificio que hizo Isaac al dejarse atar.

Durante la festividad el shofar se toca al rededor de cien veces durante el rezo de Musaf y ahí se recuerdan los distintos significados que tiene. Hay tres categorías principales en dichos rezos: Maljuyot, implica enunciar a D-os como Rey recordamos el mundo creado y la armonía que existe en él cuando D-os es el centro; Zijronot, recordamos el servicio que hicieron nuestros antepasados y la relación que mantenían con D-os; Shofrot, se recuerdan las trompetas de antaño y la fuerza con la que sacudían a cada individuo.