El primer ministro Benjamín Netanyahu instó el miércoles al secretario general de Naciones Unidas, Antonio Gutérres, a cambiar la postura de la ONU hacia Israel durante una reunión en Nueva York.
En un encuentro con Gutérres al margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, y según un comunicado de la Oficina de Prensa del Gobierno, Netanyahu «le exigió que cambiara la actitud» de la organización hacia el Estado de Israel.
El mandatario expresó a Gutérres que «es insostenible que mientras se están produciendo grandes cambios para mejorar en todo el mundo y en Oriente Medio, la ONU no se haya visto afectada y se haya mantenido firme en su hostilidad hacia Israel».
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Netanyahu acusó al organismo mundial de “críticas infundadas a Israel” e instó a la ONU a condenar la “subversión iraní y el terrorismo palestino”.
«Ha llegado el momento de que la ONU condene la subversión iraní y el terrorismo palestino contra civiles inocentes y se abstenga de sus críticas infundadas a Israel», Primer Ministro Netanyahu.
Por su parte, el secretario general «reafirmó su compromiso con el logro de una solución de dos Estados basada en las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, el derecho internacional y acuerdos previos y destacó la necesidad de abstenerse de cualquier acto que pueda socavarla», informó su oficina mediante un comunicado.
Gutérres condenó la violencia, “incluidos los actos de terrorismo”, dijo su oficina, y señaló que “las operaciones de seguridad deben realizarse con pleno respeto” del derecho internacional.
En julio, Gutérres dijo que Israel había utilizado fuerza excesiva durante una operación antiterrorista en la ciudad palestina de Jenin. La acusación marcó una rara condena directa a Israel por parte del secretario general y provocó una disputa abierta con el embajador de Israel ante el organismo mundial, Gilad Erdan, según The Times of Israel.
La operación de Jenin se produjo en respuesta a una serie de ataques terroristas mortales que surgieron de Jenin, y las 12 víctimas palestinas eran combatientes, según las Fuerzas de Defensa de Israel. La mayoría fueron reclamadas por grupos terroristas.
Netanyahu se dirigirá a la Asamblea General el viernes por la mañana.
Israel y Estados Unidos han acusado durante mucho tiempo a la ONU de parcialidad contra el Estado judío.
La Asamblea General aprobó más resoluciones críticas hacia Israel que contra todas las demás naciones juntas en 2022, continuando un largo patrón de enorme enfoque en el Estado judío.
Además de las resoluciones, hay dos investigaciones abiertas de la ONU sobre Israel, el único país bajo tal escrutinio. Los miembros de ambas investigaciones critican duramente a Israel y hacen declaraciones antisemitas, pero no han sido destituidos de sus cargos, a pesar de la presión ejercida.
Guterres critica regularmente a Israel, pero rara vez se pronuncia en contra de las acciones palestinas.
Al inaugurar la Asamblea General el martes, Guterres destacó el conflicto palestino-israelí y lamentó el aumento de la violencia durante el último año y medio.
“En Oriente Medio, la escalada de violencia y el derramamiento de sangre en el territorio palestino ocupado está cobrando un precio terrible entre los civiles”, afirmó.
Gutérres también advirtió que “las acciones unilaterales se están intensificando”, en aparente referencia a la expansión de los asentamientos israelíes en Judea y Samaria, “y socavando la posibilidad de una solución de dos Estados, el único camino hacia una paz y seguridad duraderas para palestinos e israelíes”.
La enviada especial de Estados Unidos para combatir el antisemitismo, Deborah Lipstadt, dijo que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU era a menudo antisemita en un evento organizado por el Comité Judío Estadounidense en la ciudad de Nueva York el martes.
“El Consejo de Derechos Humanos es uno de los lugares donde el sesgo antiisraelí se convierte con tanta frecuencia en antisemitismo”, dijo Lipstadt.
El enviado de Israel ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, con sede en Ginebra, dijo a principios de este año que Israel había sido el objetivo de alrededor de un tercio de todas las resoluciones condenatorias que el consejo había aprobado desde su creación en 2006.
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