El gobierno de Joe Biden ha aconsejado a Israel que retrase su ofensiva terrestre en Gaza, con la esperanza de ganar tiempo para las negociaciones sobre rehenes y permitir que llegue más ayuda humanitaria, reportó The New York Times.

Los funcionarios estadounidenses también quieren más tiempo para prepararse para los ataques a los intereses estadounidenses en la región por parte de grupos respaldados por Irán, que, según dijeron al NYT, probablemente se intensificarán una vez que Israel entre a Gaza.

El gobierno de Biden no está haciendo una exigencia a Israel y todavía apoya la incursión terrestre y el objetivo de Israel de erradicar a Hamás.

Pero la liberación de Hamás de dos mujeres estadounidenses el viernes ha impulsado a Washington a sugerir con más urgencia que los israelíes den tiempo para negociar la liberación de todos los demás rehenes, dijeron funcionarios al NYT.

Dos funcionarios estadounidenses dijeron que el consejo a los israelíes de posponer la guerra terrestre fue transmitido a través del secretario de Defensa, Lloyd Austin, porque el Pentágono está ayudando a asesorar a Israel sobre acciones militares, incluida la ofensiva terrestre.

Austin ha tenido llamadas casi diarias con su homólogo israelí, Yoav Gallant, para discutir cuestiones operativas, envíos de armas estadounidenses a Israel y despliegues militares estadounidenses en la región.

Un diplomático de la embajada de Israel en Washington negó que el gobierno de Estados Unidos estuviera aconsejando a los israelíes que retrasaran la invasión terrestre y dijo: “Tenemos un estrecho diálogo y consultas con la administración de Estados Unidos. Estados Unidos no está presionando a Israel con respecto a la operación terrestre”.

Un funcionario con conocimiento de las negociaciones sobre los rehenes, que se llevan a cabo principalmente a través de Catar, dijo al NYT que Hamás ha advertido que una ofensiva terrestre haría mucho menos probable la liberación de rehenes.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, evitó responder directamente cuando se le preguntó este domingo en el programa “Face the Nation” de CBS.

Los funcionarios estadounidenses dicen que esperan que la invasión terrestre se retrase, pero temen jugar con la narrativa que Irán y sus aliados han difundido durante mucho tiempo acerca de que Estados Unidos controla secretamente a Israel.

Ya ha habido una serie de ataques con aviones no tripulados contra fuerzas estadounidenses en la región.

Los funcionarios estadounidenses dijeron que dejar la impresión de que el gobierno de Biden mueve los hilos en Israel podría arrastrar a Estados Unidos a un conflicto directo con Irán o con sus aliados en la región.

Los funcionarios estadounidenses temen que las milicias iraquíes apoyadas por Irán ataquen a los aproximadamente 2.500 soldados estadounidenses en Irak y a otras instituciones o ciudadanos estadounidenses.

Por ello EE. UU. ha tomado precauciones en Irak, como pedir la salida de personal no esencial en su misión diplomática.

Uno de los funcionarios estadounidenses dijo que los se ha subrayado no sólo la cuestión de los rehenes a los israelíes, sino también la preocupación por las víctimas civiles y la ayuda humanitaria.

La invasión terrestre se ha retrasado repetidamente, según 4 altos funcionarios de defensa israelíes, quienes agregaron que desconocían el motivo del aplazamiento. Dos de los funcionarios dijeron que posiblemente estaba relacionado con las negociaciones.

CNN reportó este domingo que funcionarios estadounidenses creen que un retraso podría dar tiempo para la liberación de más rehenes.

Un alto funcionario militar israelí dijo que, basándose en las conversaciones entre Estados Unidos y Catar, Hamás podría liberar a unos 50 ciudadanos con doble nacionalidad al margen de cualquier acuerdo más amplio.

Los repetidos retrasos también reflejan una aparente tensión creciente entre Netanyahu y Gallant, quien apoya una operación militar amplia que también incluiría golpear a Hezbolá en Líbano.

Netanyahu se ha opuesto a la operación más amplia por ahora, y los funcionarios estadounidenses también han expresado en privado su preocupación a los líderes israelíes sobre cualquier respuesta amplia a Hezbolá, lo que le abriría a Jerusalén un frente norte.

Hezbolá ha intensificado sus ataques con cohetes dirigidos al norte de Israel en los últimos días, e Israel ha respondido con ataques aéreos y fuego de artillería en el sur del Líbano, pero hasta ahora se ha abstenido de llevar a cabo una ofensiva importante.

El gobierno israelí ha pedido a residentes de varias localidades del norte de Israel que abandonen sus hogares.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío

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